Desconecta. Tu pelo se electrifica al quitarte el gorro: el inesperado truco con papel de aluminio que funciona
Desconecta. Tu pelo se electrifica al quitarte el gorro: el inesperado truco con papel de aluminio que funciona

MADRID, 5 dic. 2025 (Europa Press) -
En invierno es habitual recurrir a gorros, bufandas o capuchas para protegerse del frío, pero al quitarlos muchas personas se encuentran con el mismo problema: el pelo se levanta, se pega, gana volumen de forma irregular o queda completamente fuera de control.
La responsable es la electricidad estática, que surge cuando dos materiales se frotan entre sí. En este caso, el gorro —especialmente si es de lana sintética o acrílico— roza el cabello y provoca una transferencia de electrones que deja el pelo cargado y difícil de manejar.
A esto se suma la calefacción, el ambiente seco y el uso frecuente de tejidos sintéticos, factores que favorecen la acumulación de carga eléctrica y explican por qué este "efecto globo" es tan habitual en los meses fríos. Aunque a veces parece inevitable, existe un truco muy sencillo que ayuda a neutralizar la electricidad en cuestión de segundos: el papel de aluminio.
EL TRUCO DEL PAPEL DE ALUMINIO QUE FUNCIONA DE VERDAD
Aunque parezca un remedio improvisado, tiene una explicación sencilla: el aluminio es un material conductor y, al deslizarlo suavemente por la superficie del pelo, atrae y redistribuye las cargas eléctricas, permitiendo que se disipen. No evita que el cabello vuelva a cargarse más adelante, pero sí corrige el efecto en el momento, que es cuando más se nota.
Para utilizarlo basta con arrugar un trozo pequeño en forma de bola, sin compactarlo demasiado, y pasarlo muy suavemente por encima del peinado. No hay que frotar ni presionar, solo deslizarlo para que recoja la carga acumulada. En cuestión de segundos, el cabello deja de levantarse y recupera un aspecto más ordenado.
Es un truco especialmente práctico cuando el problema aparece justo al quitarse el gorro en la calle, en la oficina o en el transporte público. Por eso, una forma sencilla de adelantarse a la situación es llevar en el bolso una pequeña bola de papel de aluminio, lista para usar en cuanto el pelo empiece a electrificarse.
OTROS PEQUEÑOS TRUCOS POR SI NO LLEVAS ALUMINIO A MANO
Aunque el papel de aluminio es una de las formas más cómodas e inmediatas de combatir la electricidad estática, no es la única. Si no lo tienes a mano, pueden funcionar otras soluciones rápidas:
- Humedecer ligeramente las manos y pasarlas por el cabello ayuda a disipar la carga gracias a la humedad.
- Usar un cepillo de madera, que no genera electricidad como ocurre con los de plástico.
- Aplicar una mínima cantidad de sérum o crema de manos puede domar los mechones más rebeldes, especialmente si el cabello está muy seco.
- Pasar una toallita de secadora, que contiene agentes catiónicos capaces de neutralizar la electricidad, también es un truco muy efectivo.



