EEUU: El Centro Presidencial Obama defiende su diseño tras años de críticas
La Fundación Obama explicó que la falta de ventanas del edificio en Chicago es intencional

La subdirectora de la fundación, Kim Patterson, explicó que la escasa presencia de ventanas responde a una decisión funcional. "La falta de luz natural es intencional, porque el sol no es amigo del arte ni de los objetos históricos que se exhibirán en el interior", señaló durante una visita al predio, en declaraciones a CBS News.
Patterson también defendió el diseño poco convencional del edificio, al indicar que su forma busca representar "cuatro manos que se unen", como símbolo de la acción colectiva y la participación ciudadana.
El proyecto no estuvo exento de controversias desde sus inicios. Parte de los residentes de Chicago cuestionaron el impacto del edificio en el paisaje urbano y su estilo arquitectónico, que algunos medios locales compararon con una estructura brutalista, apodada de manera irónica como "el Obamalisk".
En 2018 se presentó además una demanda judicial que acusaba a la ciudad de transferir ilegalmente terrenos públicos a la fundación, un litigio que se cerró en 2022. A lo largo de los años también se registraron protestas en el lugar de las obras, especialmente vinculadas al diseño y al uso del espacio público.
Pese a ello, la fundación aseguró que las inquietudes de la comunidad influyeron en decisiones clave del proyecto. Patterson citó como ejemplo la ubicación del estacionamiento, inicialmente previsto en superficie, pero finalmente trasladado a un área subterránea para evitar bloquear la luz solar de viviendas y jardines cercanos.
El Centro Presidencial Obama, dedicado al legado del expresidente Barack Obama, no será una biblioteca tradicional administrada por el gobierno federal, sino un espacio cultural y educativo gestionado por la fundación privada.
Desde 2017, el costo estimado del proyecto pasó de US$500 millones a alrededor de US$850 millones, reflejando ajustes en el diseño, inflación y complejidades constructivas. La inauguración del centro está prevista para junio de 2026, cuando se convertirá en uno de los principales nuevos polos culturales del South Side de Chicago. (ANSA).



