El estado insular de Palau acepta acoger a migrantes expulsados por EE. UU.
El pequeño país insular de Palau, ubicado en el Pacífico, acordó acoger hasta 75 migrantes expulsados por Estados Unidos en virtud de un acuerdo de US$7,5 millones.

El pequeño país insular de Palau, ubicado en el Pacífico, acordó acoger hasta 75 migrantes expulsados por Estados Unidos en virtud de un acuerdo de US$7,5 millones, informaron ambos gobiernos.
Desde que regresó a la Casa Blanca en enero, el presidente Donald Trump aceleró las deportaciones de personas sin documentos, como prometió en campaña.
En virtud de un nuevo memorando de entendimiento, Palau permitirá que hasta 75 ciudadanos de terceros países procedentes de Estados Unidos vivan y trabajen en ese archipiélago escasamente poblado, explicaron el miércoles fuentes oficiales.
A cambio, Washington concederá US$7,5 millones a Palau para servicios públicos y necesidades de infraestructura.
Con unas 20.000 personas repartidas en cientos de islas volcánicas y atolones de coral, Palau es uno de los países más pequeños del mundo en cuanto a habitantes.
Los migrantes que llegarán desde Estados Unidos, que no han sido acusados de ningún delito, ayudarán a cubrir puestos de trabajo necesarios en Palau, añadieron ambas partes.
El acuerdo se anunció tras una llamada entre el presidente de Palau, Surangel Whipps, y el subsecretario de Estado estadounidense, Christopher Landau.
Landau afirmó que Estados Unidos se comprometía a construir un nuevo hospital, a mejorar la capacidad de Palau para responder a desastres nacionales y a proporcionar más recursos al país oceánico.
El archipiélago de Palau, una cadena de islas de piedra caliza y atolones de coral, se encuentra a unos 800 kilómetros al este de Filipinas.
Obtuvo la independencia en 1994, pero permite al ejército estadounidense utilizar su territorio en virtud de un acuerdo de larga data.
El gobierno de Trump ha firmado este año acuerdos similares con países africanos y latinoamericanos.



