El ministro de Finanzas se une a la dimisión del canciller austriaco tras la retirada política de Kurz
El ministro de Finanzas de Austria, Gernot Blumel, ha anunciado este jueves su renuncia al cargo en una jornada marcada por la dimisión del canciller, Alexander Schallenberg, apenas dos meses después de asumir el cargo como respuesta a la retirada política de su predecesor en el cargo, Sebastian Kurz.
Así, Blumel ha "decidido dejar la política" motivado principalmente por su familia, que ha tenido que soportar amenazas de muerte en repetidas ocasiones por la actividad política del ahora exministro, tal y como ha detallado en un vídeo publicado en sus redes sociales.
Además, el nacimiento de su segundo hijo también ha servido de aliciente para dar un paso al lado en la política nacional, si bien el la renuncia de Kurz ha sido otro de los más importantes argumentos. "Ha sido un honor", ha sentenciado Blumel.
Previamente, el canciller Schallenberg también ha anunciado su renuncia al cargo tras la retirada política de Kurz pues considera que el liderazgo del partido y el Gobierno deben estar bajo el mismo mando.
La prensa de Austria ya señalaba por la mañana al ministro del Interior, Karl Nehammer, como el posible sucesor de Kurz al frente de la formación política y que incluso podría ser designado como canciller este mismo viernes, tal y como apunta el diario 'Kronen Zeitung'.
"No es mi intención y nunca ha sido mi objetivo asumir la función de líder del partido", ha indicado en una serie de mensajes en su cuenta de la red social Twitter, antes de señalar que, a su juicio, las oficinas de jefe del Gobierno y líder del partido gobernante "deben reunirse en una mano". Asimismo, ha indicado que la decisión de Kurz le genera "respeto" y ha agradecido su trabajo por Austria.
Kurz ha justificado en la mañana de este jueves que ha sido el nacimiento de su hijo lo que finalmente le ha hecho tomar la decisión de retirarse de la política. También se ha referido a las acusaciones de corrupción que pesan sobre él y ha señalado que los últimos meses han sido "muy agotadores".
Kurz está acusado de incitar al pago de sobornos, mientras que varias personas de su círculo más cercano están acusadas del pago de los mismos, entre los que destacan, entre otros, sus estrategas de medios de comunicación Johannes Frischmann y Gerald Fleischmann.
La investigación está relacionada con unas encuestas que supuestamente encargó el Ministerio de Finanzas de Austria en las que Kurz y el Partido Popular Austríaco salían favorecidos y que aparecieron en un grupo de medios del país. Como consecuencia del escándalo, Los Verdes, socios de coalición de Kurz, habían exigido su dimisión para seguir en el Gobierno.
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