Espacio: Descartada la hipótesis de un océano en Titán
La luna más grande de Saturno aumenta probabilidades de encontrar formas de vida

En cambio, su interior podría estar compuesto principalmente por lodo, con pequeñas bolsas de agua de deshielo cerca del núcleo rocoso.
Así lo señala un estudio publicado en la revista Nature, liderado por el investigador italiano Flavio Petricca, del Jet Propulsion Laboratory de la NASA, con la participación de otros científicos italianos de la Universidad de Bolonia y de la Universidad Sapienza de Roma.
Aunque pudiera parecer lo contrario, el hallazgo no reduce las probabilidades de encontrar formas de vida en Titán; por el contrario, podría aumentarlas.
Si el escenario propuesto por la investigación es correcto, los nutrientes disponibles estarían concentrados en pequeñas bolsas de agua, en lugar de dispersarse en un vasto océano, lo que podría facilitar el desarrollo de organismos simples.
Además, la temperatura jugaría a favor: "Nuestros análisis —afirma Petricca— indican que las bolsas de agua podrían alcanzar los 20 grados".
Los datos de la misión Cassini habían alimentado la sospecha de la existencia de un océano subterráneo debido a que la luna se deforma de manera significativa mientras sigue su órbita elíptica alrededor de Saturno.
Sin embargo, los autores del estudio añadieron a estas observaciones el análisis de los tiempos: las deformaciones de Titán se producen con un retraso de 15 horas respecto del pico de la atracción gravitatoria de Saturno.
Esto sugiere que la energía necesaria para modificar la forma de la luna es mucho mayor de lo que se pensaba, porque su interior no es líquido, sino mucho más viscoso.
"Esta fue la pistola humeante —concluye Petricca— que indicaba que el interior de Titán es distinto de lo que se había supuesto anteriormente". (ANSA).



