Ola de calor en torno a la capital de chile agrava incendios forestales
SANTIAGO, 16 dic (Reuters) - La ola de calor con temperaturas récord y escasa humedad que golpea esta semana la zona central de Chile ha agravado las condiciones de varios incendios forestales que ya han consumido más de 7.000 hectáreas, dejando decenas de hogares evacuados y la capital en alerta sanitaria por una nube de humo.
De acuerdo a la estatal Corporación Nacional Forestal (Conaf), brigadas combaten actualmente 18 incendios concentrados en las regiones centrales de Valparaíso, Metropolitana de Santiago y O'Higgins, así como un número menor en las sureñas regiones de Ñuble, Biobío, La Araucanía y Los Lagos.
Entre varias localidades de la región de Valparaíso, se registran hasta ahora unas 40 viviendas evacuadas y una decena de viviendas destruidas.
El viernes Santiago, de unos seis millones de habitantes, amaneció cubierta de humo a raíz de un incendio en la cercana localidad rural de Curacaví, donde el fuego ya arrasó más de 1.700 hectáreas y entre otras medidas se está gestionando el retiro de 120 animales.
Autoridades locales emitieron una alerta por riesgo sanitario y llamaron a personas en grupos de riesgo a evitar exponerse al humo y a no realizar ejercicio mientras evalúan la suspensión de clases durante el resto de la jornada.
"Este es humo producto de incendios forestales. Lo que se está haciendo es monitorear el material particulado fino y más grueso para ver cómo esto puede afectar a la salud", dijo a periodistas la delegada presidencial metropolitana, Constanza Martínez.
"Esto también depende de cuánto tiempo se encuentre esta capa de humo en la región metropolitana y cuánto tiempo se generen estos incendios, es probable que la próxima semana también nos encontremos en esta situación", añadió.
A inicios de esta semana, el gobierno chileno dijo que coordinaba mayores recursos para controlar el avance de los incendios cuando arranca el verano austral con una ola de calor.
El jueves por la tarde, en Santiago se registraron 36,7 grados Celsius, un nuevo récord de temperatura máxima para este año y la tercera más alta en 111 años, reportó el servicio oficial de meteorología.
"Estamos dentro de una ola de calor (...) por lo tanto no solamente está aumentando en intensidad el incendio sino que también nuestros combatientes forestales de Conaf y los bomberos tienen una mayor exposición a la deshidratación", dijo a Reuters Miguel Muñoz, director metropolitano de la Oficina Nacional de Emergencia tras visitar zonas afectadas en Curacaví.
(Reporte de Reuters TV y Natalia Ramos)
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