Papa: "Basta de guerra en Ucrania, Moscú y Kiev deben dialogar"
El mensaje Urbi et Orbi: "Que el espíritu comunitario prevalezca en Europa"

"Al Príncipe de la Paz encomendamos todo el continente europeo, pidiéndole que siga inspirando un espíritu de comunidad y colaboración, fiel a sus raíces e historia cristianas, y solidario y acogedor con los necesitados. Oramos de manera especial por el atormentado pueblo de Ucrania: que cese el estruendo de las armas y que las partes implicadas, apoyadas por el compromiso de la comunidad internacional, encuentren la valentía de entablar un diálogo sincero, directo y respetuoso", dijo el pontífice.
"Quien no ama no se salva, se pierde, este es el camino hacia la paz: la responsabilidad. Si cada uno de nosotros, en todos los niveles, en lugar de culpar a los demás, reconociera primero sus propias deficiencias y pidiera perdón a Dios, y al mismo tiempo se pusiera en el lugar de quienes sufren, y se solidarizara con los más débiles y oprimidos, entonces el mundo cambiaría", afirmó el Papa.
"Podemos y debemos hacer nuestra parte para rechazar el odio, la violencia y la oposición, y practicar el diálogo, la paz y la reconciliación", exhortó.
León XIV ofreció saludos en diez idiomas, incluyendo latín, chino y árabe.
Tras retomar la tradición de felicitar la Navidad en varios idiomas, el último en hacerlo había sido Juan Pablo II, León XIV impartió la bendición Urbi et Orbi desde la galería central de la Basílica de San Pedro, ante aproximadamente 26.000 personas en la plaza, según la oficina de prensa de la Santa Sede.
Más temprano, a las 6 de la mañana (hora local), el pontífice encabezó la Santa Misa de la Natividad del Señor en la Basílica de San Pedro.
Esta ceremonia marca el regreso de una tradición ausente desde 1994 cuya última celebración tuvo lugar durante el pontificado de San Juan Pablo II. (ANSA).



