R. Unido.- El activista egipcio-británico Alaa Abdelfatá se disculpa por una serie de publicaciones antiguas en redes
R. Unido.- El activista egipcio-británico Alaa Abdelfatá se disculpa por una serie de publicaciones antiguas en redes.

MADRID, 29 Dic. 2025 (Europa Press) -
El activista egipcio-británico Alaa Abdelfatá, que recientemente llegó a Reino Unido tras ser excarcelado después de casi una década entre rejas en Egipto, ha tenido que disculparse este lunes ante una serie de publicaciones antiguas que han resurgido en redes sociales y que han hecho incluso que varios políticos conservadores hayan pedido que se le retire la nacionalidad británica.
"En su mayoría, eran expresiones de la ira y la frustración de un joven en tiempos de crisis regionales (las guerras en Irak, Líbano y Gaza) y el aumento de la brutalidad policial contra la juventud egipcia. Lamento especialmente algunos que fueron escritos en medio de una batalla de insultos online en total desprecio a cómo lo podría interpretar el resto de la gente", ha afirmado.
En este sentido, el activista ha reconocido que algunos mensajes son "impactantes" y "dolorosos". "Por ello me disculpo sin ambages", ha indicado, explicando que en su juventud utilizaba tonos "frívolos, impactantes y sarcásticos en el naciente y febril mundo de las redes sociales".
"Algunos tuits han sido completamente malinterpretados, aparentemente de mala fe. Por ejemplo, un tuit compartido para alegar homofobia por mi parte, en realidad ridiculizaba la homofobia. He pagado un alto precio por mi apoyo público a los derechos LGBTQ en Egipto y en el mundo", ha defendido.
De la misma forma, ha alegado que otro mensaje ha sido "malinterpretado" para sugerir que es partidario de la negación del Holocausto. "De hecho, el intercambio demuestra que claramente me estaba burlando de la negación del Holocausto", ha argüido.
"Me tomo muy en serio las acusaciones de antisemitismo. Siempre he creído que el sectarismo y el racismo son fuerzas siniestras y peligrosas, y cumplí mi parte y pagué el precio por defender los derechos de las minorías religiosas en Egipto", ha añadido.
El activista ha reiterado así que fue encarcelado por su "constante defensa de la igualdad, la justicia y la democracia laica". "Esto incluyó rechazar de forma pública el discurso antijudío en Egipto, a menudo con riesgo para mí mismo, defender los derechos LGBTQ+, defender a los cristianos egipcios y hacer campaña contra la tortura y la brutalidad policial", ha aseverado.
El primer ministro británico, Keir Starmer, ha catalogado los mensajes en redes sociales de "absolutamente aborrecibles". "Sé que con el aumento del antisemitismo y los recientes ataques, ha aumentado la angustia de muchos en la comunidad judía en Reino Unido. Estamos tomando medidas para revisar los fallos de información en este caso", ha expresado.
La líder de la oposición británica, Kemi Badenoch, había instado anteriormente al Ministerio del Interior a "considerar todas las opciones posibles" contra el activista, incluyendo la posibilidad de revocarle la ciudadanía y expulsarle de Reino Unido.
"Una cosa es trabajar por la liberación de alguien que ha sido tratado injustamente, como lo hicieron gobiernos anteriores. Otra muy distinta es elevarlo, públicamente y sin crítica alguna, a la categoría de héroe moral", ha apuntado.
En este sentido, ha defendido que ante un aumento de los discursos del odio contra las comunidades judías desde los ataques del 7 de octubre de 2023 por parte de las milicias palestinas --incluyendo los asesinatos en Mánchester, la playa de Bondi y otros lugares-- los "llamamientos a la violencia contra los judíos no pueden ignorarse".
El activista, una de las figuras más destacadas de la revuelta que propició la caída del régimen del presidente Hosni Mubarak en 2011 dentro de la conocida como Primavera Árabe, fue condenado a cinco años de cárcel por difundir "noticias falsas" tras verter críticas contra el Gobierno egipcio, si bien cumplió otros dos años más debido a que las autoridades no reconocieron el tiempo que estuvo en prisión provisional.
Su familia denunció que nunca recibió visita consular alguna durante su estancia en la cárcel, motivo por el que realizaron huelgas de hambre tanto él como su madre. Tras una petición del Consejo Nacional para los Derechos Humanos (NCHR), el presidente Abdelfatá al Sisi le concedió el perdón.
Tras ser excarcelado, el activista denunció que las autoridades egipcias le habían impuesto una prohibición de viaje, si bien finalmente pudo viajar a Londres para reunirse con su familia, un hecho que fue celebrado por el propio Starmer.



