Serie A: Con el último aliento
Udinese empató con Lazio de local con un gol convertido en tiempo adicionado

(di Lorenzo Padovan) (ANSA) - UDINE, 27 DIC - Un gol del británico Keinan Davis en el quinto minuto adicionado al tiempo reglamentario, evitó hoy una nueva derrota de Udinese y dejó con sabor a derrota a Lazio, que se había puesto en ventaja a diez del final por intermedio del uruguayo Matías Vecino, pero terminó llevándose un punto del Bluenergy Stadium en uno de los adelantos de la decimoséptima fecha.
Andrea Colombo, que venía de arbitrar la final de la Supercopa de Italia que consagró campeón a Napoli al derrotar a Bologna en Riad el pasado lunes, se estaba por llevar el silbato a la boca hoy cuando Davis sacó un remate potente a dos segundos para el final de los cinco minutos de descuento que sorprendió a Ivan Provedel y decretó el 1-1 definitivo.
El equipo entrenado por el alemán Kosta Runjaic, que venía de sufrir una durísima derrota como visitante y por 5-1 frente a la colista Fiorentina (que celebró así su primer triunfo en el torneo y hoy cayó por 1-0 en casa del Parma), evitó de ese modo un nuevo traspié y amargó a la Lazio de Maurizio Sarri, que terminó pagando caro por no haber sentenciado el pleito cuando tuvo la chance de hacerlo.
Para algunos, el gol de Davis resultó un acto de justicia, pues el visitante se había puesto en ventaja con un remate de Vecino que no parecía llevar peligro, pero que no logró despejar el francés Oumar Solet y decretó el 1-0 a diez minutos del final, tras lo cual Lazio contó con otra ocasión dilapidada por el ingresado danés Gustav Isaksen para asestar el golpe de nocaut en el arco defendido hoy por Daniele Padelli.
Fue debido a la sanción que debió purgar el germano-nigeriano Maduka Okoye, una de las bajas que sufrió hoy Udinese ante un rival que también extrañó al lesionado Nicoló Rovella, al croata Toma Basic y al francés Mattéo Guendouzi, suspendidos, y al nigeriano Fisayo Dele-Bashiru y al franco-senegalés Boulaye Dia, que disputan la Copa Africana de Naciones que se celebra en Marruecos con sus respectivas selecciones nacionales.
Sarri optó finalmente por Tijjani Noslin como titular para acompañar a Mattia Zaccagni en la ofensiva junto a Matteo Cancellieri, y el neerlandés generó la primera llegada de riesgo en el partido a los 8' con un remate que se estrelló en la cara posterior del poste, aunque a 15 minutos del final del tiempo reglamentario mandó al ruedo en su reemplazo al argentino Valentín Castellanos.
Nicoló Zaniolo protagonizó la primera respuesta del local a los 26' con un zurdazo que se fue rozando el poste del arco defendido por Provedel tras desviarse en el camino en el franco-marroquí Reda Belahyane y dos minutos después Davis desperdició otra clara situación de riesgo para Lazio al rematar a la tribuna desde inmejorable posición, aunque tendría su revancha antes del final del partido.
La última del primer tiempo fue para el visitante, cuando Nicoló Bertola intentó jugar al límite y dejar en posición adelantada a Noslin, quien avanzó habilitado hacia el arco de Udinese, pero tardó en definir y permitió el cierre providencial del danés Thomas Kristensen para tranquilidad de Runjaic y de los fanáticos de Udinese, mayoría entre los cerca de 25.000 espectadores que se dieron cita en el estadio.
Los equipos se fueron al descanso igualados en cero y al regreso fue Lazio el que volvió a llegar con peligro con un remate desviado de Cancellieri a los 52', momentos antes de que Bertola se lesionara y tuviera que dejarle su lugar en cancha al francés Hassane Kamara, quien a los 73' generó una jugada polémica cuando su remate se desvió en el brazo del español Mario Gila tras impactar en su cabeza, situación por la cual Colombo y el VAR no sancionaron penal.
Sarri mandó al ruedo a Castellanos para revitalizar a Lazio en la ofensiva, pero fue Udinese el que volvió a generar riesgo ante la valla de Provedel con un remate de Davis que lo obligó a esforzarse, situación que parecía presagiar que el duelo se saldaría sin festejos hasta que Solet, tras el remate de Vecino de larga distancia, desvió el balón al intentar despejarlo y sorprendió a un Padelli que nada pudo hacer para evitar el gol.
A los 84', su colega Provedel demostró sus reflejos al conjurar uno de Zaniolo, mientras Runjaic realizaba tres variantes simultáneas para buscar el empate, pero fue el equipo de Sarri el que estuvo más cerca de igualar con aquel disparo de Isaksen que parecía sentenciar el pleito hasta que Padelli apareció en escena para desviarlo y mantener en partido a Udinese.
Davis confirmó la máxima del fútbol que afirma que los goles que no se convierten en un arco, se sufren en el otro, y con tras controlar el balón, sacó un zurdazo inatajable para Provedel que hizo delirar al público en el Bluenergy Stadium algunos minutos más tarde, pues el grito de gol debió esperar hasta que el VAR confirmó que no había existido una supuesta mano previa del delantero británico.
Fue la última emoción del partido, tras la cual Colombo decretó el final para alegría de los locales, que celebraron como un triunfo el empate que tuvo sabor a derrota para Lazio. (ANSA).



