Chocó un colectivo y se incrustó en un árbol en Villa Soldati: 50 heridos
Un semirrápido de la línea 28 intentó esquivar a una camioneta que invadió su carril y se subió a un bulevar arbolado; en el lugar no funcionaba el semáforo
Cincuenta personas resultaron heridas ayer cuando el colectivo en el que viajaban por el barrio de Villa Soldati se incrustó contra un árbol , al intentar esquivar una camioneta que realizó una mala maniobra e invadió el carril por el que circulaba el ómnibus, según relataron los testigos del hecho.
El accidente ocurrió después del mediodía en el cruce de la avenida Rabanal con la calle Berg. Si bien en esa esquina el semáforo había salido de funcionamiento días atrás porque ladrones se habían robado los cables, el desperfecto del dispositivo no habría tenido relación con el accidente. Los vecinos denunciaron que, en poco más de una semana, éste fue el segundo accidente que se produjo en el lugar.
Los hechos se desencadenaron cuando una camioneta Partner blanca, que transitaba a la derecha de un interno de la línea 28 sobre Rabanal, intentó girar hacia la izquierda en Berg. Según pudo reconstruir LA NACION, el colectivo vio invadido su carril, fue rozado por el utilitario y debió sortear un impacto mayor: al correrse también hacia la izquierda, subió al bulevar de la avenida Rabanal y se incrustó contra un frondoso árbol. Del otro lado del bulevar, circula el Metrobus del Sur en ambos sentidos; el circuito no fue afectado por el accidente.
Como consecuencia del impacto, 50 personas -en su mayoría, pasajeros del interno de la línea 28- recibieron heridas de distinta consideración. De ellos, 35 fueron derivados a los hospitales Durand, Penna, Argerich, Santojanni y Piñero; anoche, según fuentes del Ministerio de Salud porteño, ya ninguno quedaba internado.
El director del SAME, Alberto Crescenti, dijo a LA NACION que casi todos los lesionados sufrieron traumatismos en costillas, cráneo, cadera o brazos, mientras algunos recibieron heridas cortantes diversas. El funcionario señaló que el operativo sanitario comenzó a las 12.40, poco después de ocurrido el accidente, y culminó a las 13.30. Para el traslado de una mujer con politraumatismos hasta el Santojanni debió ser utilizado un helicóptero de emergencias que aterrizó en plena calle.
Los vecinos denunciaron que el semáforo del cruce de Rabanal y Berg no funcionaba hacía alrededor de una semana, pese a que a metros de allí hay una escuela. No obstante, admitieron que habían sido enviados al lugar agentes de tránsito del gobierno porteño. Su presencia no pudo evitar el accidente.
Una vecina, que se identificó como Gladis, dijo a LA NACION que "en la zona había guardianes de tránsito. Uno de ellos le hizo señas al conductor de la camioneta para que doblara hacia la izquierda" y entonces ocurrió el choque.
Sonia López dijo que el semáforo de Rabanal y Berg "hacía más de una semana que no funcionaba". Otros vecinos se quejaron porque realizaron "decenas de llamadas" al gobierno de la ciudad, sin lograr que el dispositivo fuera reparado.
María Gamboa, mamá de tres niños de entre 4 y 7 años, afirmó que fue testigo del accidente, porque ocurrió cuando llevaba a sus hijos a la escuela N° 9 Luis Leloir, situada a 100 metros del lugar del accidente. "Alcancé a ver al colectivo chocar con la camioneta. Hizo un ruido fuerte, que se repitió cuando el micro se subió a la vereda e impactó contra el árbol. Por suerte, la gente lastimada podía salir sin inconvenientes", relató.
De la escuela, que tiene jornada completa, los chicos salen después de las 16. "Si el choque hubiera sido a esa hora, habría sido un desastre. Estos días sin semáforo fue muy difícil cruzar la calle cuando veníamos a buscar a nuestros hijos", dijo a LA NACION Carlos, padre de un alumno de ocho años.
Voceros de la Subsecretaría de Transporte y Tránsito porteña, que tiene a su cargo la instalación y el mantenimiento de los semáforos, confirmaron que el dispositivo de Rabanal y Berg no funcionaba. Según la información oficial, había salido de servicio 48 horas antes del accidente por el robo del cableado y otros elementos del tablero computarizado que activan la señal.
En efecto, en toda la zona son habituales las sustracciones de cables no sólo de semáforos, sino también del alumbrado público y de instalaciones eléctricas.
Los voceros recordaron que habían sido consignados agentes de tránsito en el lugar a pedido de la directora de la escuela, para proteger la integridad de los alumnos al entrar y salir de clases.
"Estoy muy apenado. Por supuesto que las mejoras de infraestructura son una pata esencial de las políticas de seguridad vial; como falló el semáforo, dispusimos agentes de tránsito. Pero el comportamiento de los conductores es igualmente importante. Las normas de tránsito deben ser cumplidas; si no hay semáforo, hay que extremar la precaución", dijo el subsecretario del área, Guillermo Dietrich.
Otro accidente que dejó nueve lesionados
Dos ómnibus urbanos chocaron ayer en la intersección de Diagonal Sur y Alsina, en el centro porteño, y nueve personas resultaron heridas. El titular del SAME, Alberto Crescenti, precisó a LA NACION que cinco de los lesionados fueron derivados al hospital Argerich y el resto, al Ramos Mejía. Además, Crescenti manifestó que dos de los lesionados presentaban “politraumatismos de consideración y por esa razón fueron atendidos de inmediato”. De todas maneras, desde el Ministerio de Salud de la ciudad informaron más tarde que ninguno revestía gravedad. La policía intentaba anoche determinar las causas del accidente.