Derrumbe en Floresta: un robot de 1200 kilos se encarga de la demolición controlada de la vivienda

Con un robot robusto, pero liviano, diseñado para enfrentar estructuras débiles, continuará el operativo en el inmueble de la avenida Rivadavia que colapsó el martes por la noche y provocó la muerte de dos personas. Con esta herramienta de alta tecnología y un trabajo de apuntalamiento previo de la estructura para evitar nuevos derrumbes, los rescatistas intentarán llegar al lugar que fue marcado por varios perros de la división canina donde, se presume, estaría la mujer desaparecida.

Llegar al sitio indicado por los animales del grupo K9, el mismo que la familia de Felicitas Cherry Ruiz la ubicó por última vez antes del derrumbe, es el objetivo del operativo que ya lleva dos días. La utilización de un robot comandado a distancia fue la mejor estrategia elegida para garantizar la seguridad de todos los rescatistas ya que hay mampostería casi suspendida en el aire y paredes que podrían precipitarse en cualquier momento.

Ayer por la tarde, la presencia de una grúa en la zona del siniestro inquietó a los vecinos. “[La grúa] carga un robot que pesa 1200 kilos, aproximadamente, que será supervisado por nosotros con la intención de encontrar a la persona desaparecida. Tendremos que evaluar situaciones sobre medianeras y las columnas laterales”, precisó el jefe de la Guardia de Auxilio, Walter Gómez Diz.

Hasta el momento las personas hay dos personas fallecidas: Jefferson Aquino, de 19 años, y Gabriela Jamile, de 12. La mujer de 72 años es la única que se encuentra desaparecida; la búsqueda inicial comenzó con perros entrenados para hallar persona vivas, pero desde el miércoles se están utilizando canes capacitados para encontrar cadáveres.

“Son elementos de alta tecnología”, amplió Gómez Diz. “Las estructuras que entraron en colapso quedaron apoyadas en el aire. Es una construcción sin ninguna guía profesional: no hay vigas, ni columnas. Los perros marcaron un sector donde hay una construcción arriba de la otra que, por más que sean precarias, están hechas con cemento, ladrillos y varillas. Era muy riesgoso hacer una búsqueda y retirar mampostería o restos de materiales porque hay una posibilidad de derrumbe”, confirmó.

Por esta razón actuará un dispositivo controlado desde el exterior que retirará parte de la estructura dañada.

Características

Se trata del robot demoledor Brokk 110 que fue elevado por la grúa que lo trasladó para introducirlo por el hueco que quedó tras el derrumbe en el interior de la multivivienda, una vieja casona construida entre 1930 y 1940 que estaba intrusada, con construcciones irregulares, sin mantenimiento y con intervenciones que debilitaron su estructura.

“Más fuerte, más listo, más duro, considerado el equipo más compacto y potente de su tamaño, es la nueva generación de robots de demolición”, describe el fabricante del robot. “Posee un sistema eléctrico de 19,5 kW, funciona con fusibles de 16 A y 32 A, y con un radio de trabajo real de 360 grados. Tiene un 15% más de potencia que Brokk 100 (y una potencia ampliada en un 50% respecto a Brokk 90), con un nuevo sistema de alimentación eléctrica reforzado y sido diseñado para enfrentarse a prácticamente cualquier problema. Es versátil en espacios confinados gracias a su tamaño compacto”, amplía en sus características principales.

“La máquina se pliega ocupando muy poco espacio y puede ser transportada en furgoneta o tráiler, y subirse en un ascensor o por las escaleras. Es la solución perfecta en una amplia gama de entornos residenciales, comerciales e industriales. Un robot de demolición que es más fuerte, más listo y más duro. Cuenta con un martillo hidráulico que incluye un kit de montaje y un punto de apoyo”, se agrega entre la información más importante.

Entre los usos más comunes de este tipo de máquina se encuentra la construcción, la industria, minas y petróleo y obras municipales.

La tarea del Brokk 110 puede llevar varias horas o días, de acuerdo a lo que vaya encontrándose en su camino. Los escombros de la demolición controlada caerán sobre los restos de las viviendas colapsadas, todas ellas construidas en forma irregular cuando la propiedad fue tomada. Luego, la remoción comenzará cuando estén dadas las garantías para que el personal de Bomberos y Guardia de Auxilio pueda ingresar.

Una vez liberada la zona de los escombros y restos más pesados podrían ingresar nuevamente los perros adiestrados para continuar con la búsqueda de la mujer desaparecida. La hipótesis más fuerte es que Felicitas Cherry Ruiz no logró salir a tiempo de la vivienda antes del derrumbe, aunque no hay una confirmación oficial al respecto.

Cuando finalicen las tareas, que pueden llevar hasta un mes, la propiedad privada quedará en manos de la Justicia que interviene por el hecho. En el caso tomó participación la Fiscalía Penal Contravencional y de Faltas N° 25 que dispuso que se labre acta por el artículo número 189 que refiere a derrumbes y otros estragos.