En el zoológico porteño nació un pichón de cóndor
El ejemplar fue incubado y es criado en aislamiento; en septiembre será liberado en Río Negro
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LA NACIONMaría Eugenia D'Alessio
El zoológico de Buenos Aires presentó un pichón de cóndor nacido en el marco del proyecto de conservación Cóndor Andino. El ave, que ya tiene un mes de vida, será liberado en septiembre.
Killa Tutijak, que en quechua significa "eclipse de luna", tiene un mes. Es hijo de Kuna y Cura, dos ejemplares de cóndor andino ( Vultur gryphus ) que viven en el zoológico de Olavarría, provincia de Buenos Aires.
El pichón pesó 185,1 gramos al nacer, y actualmente se cría en una incubadora. Es alimentado cuatro veces al día por medio de títeres de látex que asemejan a sus padres. "Se utilizan estos títeres para que las aves no tengan contacto humano", explicaron desde el zoológico porteño. Agregaron que, a través de los títeres, se lo acicala y cuida como harían sus progenitores.
El objetivo de los especialistas es que el animal pueda ser liberado y asegurarse así de que cuando esté en su hábitat pueda valerse por sí mismo. "La única manera de lograrlo es que no esté nunca en contacto con el hombre", señaló Ana María Pirra, directora de comunicación del zoo.
El huevo de Killa Tutijak fue incubado lejos de sus padres, en el Centro de Incubación del zoo de la ciudad. Hay que tener en cuenta que los cóndores suelen poner un huevo cada dos años. "Sacamos ese huevo para incubarlo artificialmente y esa pareja vuelve a poner otro", destacó Pirra, quien también comentó que actualmente los padres del pichón incuban su segundo huevo. De esta manera, el ciclo de reproducción de esta ave está asegurado.
El pichón permanecerá en la incubadora durante dos meses más, antes de pasar a otro sector, en donde seguirá en aislamiento. En el zoológico esperan que ya en septiembre el ejemplar esté en condiciones de vivir en libertad. Entonces lo soltarán en las sierras de Paileman, en la provincia de Río Negro. Aproximadamente un mes antes, permanecerá en un predio desde donde podrá ver a los cóndores que ya están libres, a modo de ambientación.
La incubación y el nacimiento de este cóndor son parte del programa conservacionista Cóndor Andino, que funciona desde 1991. El proyecto se realiza entre la Argentina y Chile, y ya permitió incubar y criar en aislamiento humano 49 pichones. Además, fueron liberados alrededor de 123 ejemplares. Las aves se devuelven a lo largo de los Andes, en aquellos lugares en donde ya se habían extinguido, como Venezuela y la costa atlántica argentina.
