La Quinta de Olivos inauguró su patio público
El Paseo de la República, un sector de 14.500 metros cuadrados dentro del predio, estará abierto de martes a domingo, de 10 a 18
1 minuto de lectura'
LA NACIONValeria Musse
Finalmente, parte del jardín de la Quinta presidencial de Olivos se convirtió en un espacio público para que los vecinos y visitantes puedan recorrerlo: un paisaje hasta ahora desconocido para la mayoría de la gente, donde la arboleda y la vegetación prevalecen. Desde ayer, todos los días excepto los lunes y las jornadas de lluvia, el Paseo de la República estará abierto de 10 a 18 (horario estival).
La inauguración despertó mucha expectativa. Y ayer temprano, cuando aún no se habían abierto las rejas, las primeras tomas fotográficas ya se capturaban desde la vereda de la vereda, de la avenida Maipú.
"Hacía falta que sacaran ese paredón. Y está bueno que hayan armado esa plaza para todos", dijo Natalia, una vecina que aguardaba, expectante, a que las rejas de acceso al parque situado en la avenida Maipú y Villate se abrieran por primera vez. Como ella, eran varias las personas que esperaban ansiosas por ese momento. Entre ellas, Marina Alarcón asomaba su cara por un agujero de la lona verde que todavía cubría las rejas del predio. "Siempre quise saber cómo era la quinta por dentro", susurró, entre risas.
A través de las redes sociales, los vecinos de la residencia de Olivos divulgaron la noticia. Raquel Ripoll llegó entusiasmada, con su perro Tano. "Me da curiosidad y quería ver cómo es el lugar", dijo. Un cartel en la entrada le advirtió que su perro debe tener un bozal para poder ingresar al predio.
Diego Ledesma recibió el consejo de sus hijas –que desde el piso superior de un edificio vecino pueden ver cómo quedó ese tramo intervenido de 14.500 metros cuadrados– de darse una vuelta por la flamante plaza. Al vecino le preocupaba si podría caminar por ahí con su mascota.
Lugar de encuentro
Ayer a las 10, fue la inauguración oficial del Paseo de la República, y como no podía ser de otra manera, estuvo a cargo del actual anfitrión de la quinta, el presidente Mauricio Macri. En su discurso, Macri se refirió varias veces al muro, que antes separaba la residencia de Olivos del barrio, y que se derrumbó para dejar lugar al nuevo paseo. "Nos ayudaron a tirar un muro abajo, y ahora puede ser un lugar de encuentro", les dijo a los obreros que realizaron la obra, presentes en el acto.
El jefe de Estado estuvo acompañado por la primera dama, Juliana Awada; el secretario general de la Presidencia, Fernando de Andreis (a cargo del organismo responsable de la obra), y el intendente de Vicente López, Jorge Macri. También participaron vecinos, los trabajadores que llevaron adelante las refacciones y chicos del Jardín de Infantes Municipal N° 8. "El valor simbólico de este proyecto es muy grande. Se trata de acortar distancias entre el Estado y la gente, derribar paredes y acercar el patrimonio del Estado a sus verdaderos dueños: los argentinos", dijo de Andreis.
Por Valeria Musse
