Una feria de food trucks resultó la gran atracción de Palermo
Tentados por la comida gourmet, miles de personas coparon Buenos Aires Market Night durante el fin de semana
1 minuto de lectura'
PARA LA NACIONDiego Castells
Miles de personas concurrieron el fin de semana al Buenos Aires Market Night en el Hipódromo de Palermo, tentados por la comida de los food trucks. Antes de que abrieran las puertas del predio, a las 19, una nutrida fila esperaba en la entrada de Avenida del Libertador y Dorrego para comenzar a degustar los distintos sabores que ofrece la feria, y que reúne a los referentes de la llamada escena foodie nacional.
Un breve recorrido por el lugar es suficiente para abrir los sentidos, y el apetito. Hay de todo: desde los clásicos sándwiches reminiscentes de los carritos de la costanera hasta mariscos, sushi, comida vegetariana y cocina de autor.
Los Infernales se especializa en lo exótico: ciervo ahumado, queso brie y cebollas en pan de campo, y croquetas de centolla con hinojo braseado y alioli; también, pancho de jabalí con humita, hebras de queso y radicheta, y choripán de ñandú.
Ésta fue la tercera edición de la versión nocturna de una iniciativa que dio sus primeros pasos en marzo de 2012, cuando Juan Aznarez decidió organizar un mercado itinerante que ofreciera productos gourmet y comida saludable. La versión diurna ya va por su quinta temporada: "La idea fue armar algo parecido a lo que había en Nueva York, Londres y otras ciudades de Europa: un mercado donde un 65% de los puestos fuera de venta de productos y un 35% de comida al paso", comentó Aznarez, el emprendedor, en la terraza de La París, el restaurante del Hipódromo a cargo del chef francés Jean Paul Bondoux, que también contó con un puesto de comida en la feria.
"Esta propuesta nocturna empezó en noviembre y la hacemos un fin de semana por mes, hasta que el clima nos permita", contó Aznarez. Y agregó: "La cocina o comida como espectáculo no estaba cuando empezamos con todo esto".
Pero ahora sí; decenas de combis y camionetas aggiornadas poblaron el recinto hípico el fin de semana y le renovaron la cara a la meca burrera. Cada camión fue acondicionado y equipado especialmente, con sus cocinas y barras; algunos food trucks representan a conocidos restaurantes que ofrecen versiones más sencillas de sus platos más elaborados. Los puestos de tiendas a rayas, banderines de colores y lamparitas que cuelgan entre los árboles le dan una impronta festiva a la feria. En el espacio central, una plaza donde antiguamente funcionó un estacionamiento, un DJ le pone ritmo a la noche, mientras los comensales degustan sus selecciones en algunas mesitas que, a las 21, ya estaban todas ocupadas.
En una de las mesas largas, estilo tablón y ubicada más cerca de la entrada, una familia numerosa optó por un clásico: la pizza. "Luego de la gran puesta en valor que realizamos del predio histórico, queríamos abrir las puertas del hipódromo a la comunidad", comentó Damián Tazzioli, director gastronómico del lugar. Los visitantes se apiñaron en largas filas para comer, pero disfrutaron de dos noches atípicas: al aire libre, con buena comida, y en el corazón de Palermo.
Opciones de un menú gourmet muy variado
90 pesos
Vale el sándwich de cerdo "Pulled Pork", de Logia Food Truck. Tiene carne marinada, salsa barbacoa y pepinillos
30 pesos
Es lo que cuesta una empanada de cordero con carne cortada a cuchillo y especias, del puesto Food Truck Argentina
Por Diego Castells
