Arte urbano. El "pibe de oro" en la escenografía porteña

De La Boca a La Paternal y del barro al vuelo. Suspendido en el aire en una danza cósmica, gambeteando, en escenas familiares o con los puños en alto, Diego Armando Maradona se vuelve mural en distintos rincones de la ciudad.

Referentes del arte urbano en el país como Martín Ron, San Spiga, El Marian, Uasen o Maximiliano Bagnasco han retratado al jugador en estadios, muros, medianeras y espacios donde su figura sorprende o se encuentra con la mirada ajena en medio del tránsito diario.

De las canchas donde dejó huella a la escenografía barrial, el territorio urbano se presenta como el museo a medida para la representación del ídolo. "Pintamos para la gente y el Diego es de la gente; los murales se vuelven santuarios", resume Bagnasco.

En la despedida al jugador, el llanto a cielo abierto también se manifestó frente a creaciones artísticas como el gigantesco rostro efímero pintado en la plaza frente a la Casa Rosada en las horas de su funeral o, al otro lado del planeta, ante la obra monumental dedicada al futbolista por el italiano Jorit Agoch en San Giovanni Teduccio, el denominado Bronx napolitano. Autores de algunas de estas obras repasan la historia de sus trabajos mientras proyectan nuevos homenajes al artista de la pelota.

El trazo de El Marian en la casa-museo de La Paternal

El graffitero Mariano Antedoménico, conocido como El Marian, es autor de varios murales icónicos dedicados a la figura del Diez. En 2010, cuando comenzó a pintar, el artista llevó el rostro de Maradona a un muro de cuatro metros de alto en la cancha de Argentinos Juniors. Seis años más tarde, su arte tiñó una pared de la casa-museo de la calle Lascano 2257, en La Paternal, donde Diego vivió cuando jugaba para aquel equipo.

El Marian cuenta que se conservaron muchas fotos con la familia dentro de este inmueble, "como una suya escuchando vinilos". En este trabajo, las letras que escriben el nombre de D10S, junto a un Maradona sonriente, fueron el aporte de otro colega, Jony. En el mismo barrio, sobre un muro de edificio de unos nueve metros de alto, otra creación del muralista, esta vez junto a Pablo Kano, muestra al número 1 de cuerpo entero con la vista en el balón. Esta imagen alude a su primera época como deportista.

San Spiga, el artista urbano que más obras dedicó al futbolista

Nacido en Viedma, el artista San Spiga ha llevado la imagen del "pibe de oro" a muros de todo el mundo, con especial énfasis en Nápoles y otras ciudades europeas. En Buenos Aires, es autor de la mayor cantidad de realizaciones de street art dedicadas a Maradona. "Toda mi obra es parte de un homenaje que vengo haciendo desde 2015, una serie que llevo por todo el mundo", señala el muralista, quien utiliza una técnica de pegado con papel de gran durabilidad. La mayor parte de sus trabajos se encuentran en La Boca y La Paternal, en el estadio Diego Armando Maradona y las calles aledañas, sobre muros de casas de familias y a la vista de los transeúntes. Spiga también es coautor, junto a Colectivo de Ideas, de dos murales situados esta semana sobre la explanada del CCK, uno de ellos de 3x4 metros, con la imagen de Diego en las figuritas del Mundial de Italia 90.

Arte en La Bombonera

Diversos murales refuerzan el colorido del estadio de Boca Juniors, club del que Maradona fue el más grande embajador. Entre estas creaciones, se encuentra La república de La Boca, un mural de nueve metros de largo por tres de alto diseñado por el mendocino Felipe Berná y ejecutado en una semana a golpe de pinceles y aerosoles por Maximiliano Bagnasco y Sebastián Cener. La obra se ubica sobre un paredón del primer piso del templo xeneize, entre las plateas media y alta, y refleja un recorrido cronológico por la historia del club y del barrio combinando símbolos como Caminito, el puente Avellaneda, los conventillos, el tango y referencias a Benito Quinquela Martín con los retratos de Diego, Riquelme o Carlos Tévez, así como de iconos de la pasión azul y oro en otros tiempos: Cherro, Delfín, Musimessi, Boyé.

Cristian English, autor del mural posteado por Giannina en el momento de la partida de Diego

Pintado sobre un local gastronómico en la calle Gualeguaychú 2993, en Devoto, sobre un portón de garage que da a la calle y cerca de una de las casas donde vivió Maradona, se ubica un mural de Cristian English que estos días fue noticia. "Dio la causalidad del universo de que Giannina Maradona estaba en un taxi y se encontró con el mural, le sacó una foto, lo compartió y al ratito se enteró de que Diego había partido. La sincronicidad de los sucesos es llamativa. Aparentemente, fue paralelo el posteo al momento en que Diego dejaba este mundo. En otras ocasiones también he pintado a Maradona, un personaje con sus bemoles pero por el que siempre tuve mucha admiración", señala el artista. Y añade: "el mural te da la posibilidad de compartir tu arte de forma exponencial. Reconozco esa virtud del muralismo, la de poder compartir tu arte con gente con la que nunca te hubieses imaginado", en su caso, recientemente, con la propia hija del astro.

La mano de Dios, un mural efímero de Martín Ron, Frizzera y Mariani

En sintonía con la limitada perdurabilidad de ciertas piezas del arte callejero, a tono, si se quiere, con la acotada existencia humana, en este caso, la del ídolo, cabe mencionar el mural efímero que Martín Ron, Leonardo Frizzera y Emiliano Mariani pintaron en 2012 en el Puente Dorrego, en la Avenida de Libertador, bajo el título La mano de Dios, de 40 metros de largo por seis de alto. Ron, emblema internacional del arte urbano y autor de obras emblemáticos dedicadas a figuras como Carlos Tévez, Ernesto Sábato o La Coca Sarli, cuenta que realizaron la obra en 2012 luego de que una acción política les tapara otra obra anterior. "Sufrimos la agresión de pintadas políticas y, en respuesta a eso, hicimos un mural de arte efímero con un homenaje a Maradona. Jugamos con la arquitectura del puente, estructura de origen inglés, como si fuera el arco de los ingleses y pintamos, en un juego visual, a Diego pegándole a la pelota con la mano. El mural se degradó en pocos años, porque era una pared que no era la ideal, pero en esa época tuvo relevancia porque estaba en auge el arte urbano y porque en esa época fue el mural más grande".

Extrarradio. Obra de Muro Sur junto al potrero de Villa Fiorito

Coincidiendo este año con el cumpleaños 60 de Maradona, el Concejo Deliberante declaró patrimonio cultural la casa donde Diego vivió en Azamor 523, en Villa Fiorito. En las inmediaciones, junto al potrero donde Pelusa jugaba de chico, el artista Ezequiel Briseño, del colectivo Muro Sur, pintó un mural de amplias dimensiones dedicado al jugador.