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El argentino que creó una partitura distinta
El método Aschero ya se usa en Europa.
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Para comprender esta historia habría que comenzar por una pregunta: ¿por qué es útil aprender a leer música? Porque quien lee música aprende a crearla y a comunicarla. Y ambas acciones hacen a la existencia del arte.
El autor de la reflexión es el argentino Sergio Aschero, de 55 años, que luce como un tenor italiano y trasciende por haber inventado un sistema para leer música, que en España e Italia -país donde reside- ya se aplica como alternativa al tradicional método de notación definido por el pentagrama, los bemoles, las notas y los sostenidos.
Su método se llama "fonología de Aschero" y, según dice su autor en diálogo con La Nación , puede traducirse como un cambio radical en el sistema de aprendizaje de la lectura musical porque facilita la aproximación a los niños desde los tres años. Más aún: a cualquier edad es posible leer música porque no hay que lidiar con la teoría y el solfeo.
"La fonología se basa en los principios de la matemática y de la óptica. Traduce imágenes y números en sonidos. Es aplicable desde los tres años y hasta en niños discapacitados", comenta el autor, que remonta el origen del método "de base científica" a los griegos. Para los niños pequeños, los sonidos se representan con figuras geométricas (círculos, cuadrados, etc.) para expresar su duración. En tanto, los colores simbolizan la intensidad. A los chicos mayores de 4 años se les enseña mediante números y colores.
"Todos saben que la luz tiene una descomposición en colores ordenados. Para que el niño reconozca los sonidos, se pintan en el teclado puntos de colores idénticos. Por ejemplo, un cuadrado colorado es el sonido de más baja frecuencia que se puede captar. El proceso es fascinante para el chico", dice el músico. Su método sirve para todos los instrumentos musicales y músicas de diversas culturas.
Aschero empezó a inventar la fonología hace 35 años, cuando con una beca del Fondo Nacional de las Artes se propuso traducir al pentagrama la música de los indios chahuancos, en el norte argentino, pero fracasó. "La música no podía reproducirse y eso me hizo entrar en crisis con mi formación musical", recuerda.
Su "fonología" es utilizada en forma alternativa por 100.000 estudiantes en España. Paralelamente, el Ministerio de Instrucción Pública de Italia acaba de incorporar el sistema Aschero en su home page en Internet, como un método alternativo para aprender el lenguaje musical. Y en Suecia ya hay organizaciones docentes que piden la convalidación oficial del método Aschero para aplicar en las escuelas.
El próximo paso de este doctor en musicología será conseguir la homologación de su invención por la Unión Europea. "El sistema de notación tradicional es comprendido sólo por el cinco por ciento de la humanidad. Y si bien los genios de la música lo conocieron, la mayoría de la humanidad no sabe utilizarlo", dice Aschero.
Y agrega: "Hay que animarse al cambio y perder el miedo. Mi deseo es socializar la lectura de la música, porque los sistemas herméticos sólo sirven a una minoría". A su regreso a Salerno, el musicólogo se abocará a irradiar su "fonología" a todas las escuelas de Italia.
Por Susana Reinoso
