Luis Suárez sin vueltas: la poca personalidad de Ronald Koeman, su relación con Diego Simeone y el futuro de Lionel Messi

Es su momento. La sensación de revancha está a flor de piel, por eso es que cada una de sus palabras tiene un contenido especial. Sus lágrimas tras la conquista de la Liga de España con Atlético Madrid recorrieron el mundo. Haber sido “desclasado” por Barcelona aumentó el morbo. Por eso, Luis Suárez es el foco de los interrogantes. En una entrevista que brindó en Madrid, el delantero uruguayo no dejó tema sin tratar y le lanzó algunos mensajes para el entrenador del Barça, Ronald Koeman: “Tanta personalidad no tenía al decirme que venía desde arriba”.

En la charla que mantuvo con la cadena COPE, el matador charrúa pasó desde su relación con Lionel Messi, su futuro probable en la MLS y cómo interactúa con el entrenador Diego Simeone: “Yo muchas veces salgo enojado conmigo. Contra el Chelsea sí me enojé porque me cambió y teníamos que dar vuelta el partido, pero después lo hablé con él. Pero con Osasuna ganamos y me fui muy enojado porque erré mucho y sufrimos por culpa mía. Simeone entiende esas situaciones, es un grandísimo entrenador que estudia cada partido y charlamos mucho”, contó Suárez.

Y agregó: “El Cholo te llama y te vende el Vaticano cuando habla. Y yo venía de sufrir lo del Barcelona y me llama un entrenador y me dice: ‘venite acá que vas a hacer esto y lo otro’. Y decís: ‘buah soy el mejor, voy ahí y la voy a romper’. Me convenció y lo único que le dije es que necesitaba tiempo para terminar de cerrar mis cosas en el Barcelona. Pero en ese momento las palabras sobraban”.

Su imagen en el centro del campo de juego tras la consagración con Atlético Madrid conmovieron. Sus lágrimas con su celular en la mano, completamente desbordado de emoción resultaron un imán: “Mi mujer estaba llorando conmigo porque sufrimos mucho el cambio, por nuestros hijos... El dinero no te da la felicidad y yo pienso en mis hijos todo el tiempo. Ella sabe los momentos que sufrí. Cuando el Barcelona arrancó la pretemporada y me mandaban a entrenar aparte, ella lo sabía y me veía sufrir cuando llegaba a casa. El momento de la despedida... después el cambio de chip para que los chicos se adapten al cambio de ciudad”.

Lógicamente que ese desahogo estaba vinculado al destrato que sintió por parte de Barcelona, aunque no se mostró resentimiento contra la institución, sino que sus sensaciones quedaron bien claras: “No voy a ir en contra del Barcelona, fue algo de la situación, del trato del momento. Con Barcelona estoy agradecido porque pude llegar a lo máximo y la gente siempre me trató espectacular”. Y después sí puntualizó sus molestias: “El presidente (Josep Maria Bartomeu), de decirle a la prensa las cosas antes de llamarme a mí. Cuando Messi estaba mal me pedían que yo hablara con Leo, lo mismo con Griezmann. Cuando me tuvieron que decir a mí algo, no me llamaron”.

Y agregó: “Yo soy consciente cuando no le soy útil al club, pero que me lo expliquen o que venga el entrenador y me lo diga. ‘No quiero que sigas por tus condiciones, porque quiero otro tipo de 9′. Pero las palabras del entrenador eran... yo las di a entender como ‘me dijeron que te dijera’ porque después internamente, antes de la transferencia él, después de dejarme tres partidos afuera de la pretemporada, me dice: ‘Si mañana no se soluciona yo voy a contar contigo para el partido con el Villlarreal’”. Ahí te das cuenta de decir, tanta personalidad no tiene. Te hace dudar entonces, no era el entrenador, venía de arriba”.

Su relación con Messi lógicamente formó parte de la entrevista y se animó a dejarse una sugerencia para el futuro del argentino: “Como amigo y aficionado del fútbol me alegraría que siga en el Barcelona y es lo que yo le recomendaría”. Ahora bien, cuando le consultaron si se ven en la MLS juntos, contestó: “No está tan claro, él tendrá que tomar sus decisiones y yo también el tiempo que me quede. ¿Si puede ir al Atlético? Messi sabe que en donde estoy yo él va a estar bien, pero hay que dejarlo que sea él el que tome la decisión”.