Trezeguet: "Sabemos que nos esperan los partidos más difíciles de la historia de River"
Con 34 años, David Trezeguet se hace cargo de la responsabilidad que representa lograr el ascenso a primera del club de Núñez; sus afectos y sus recuerdos fueron los motivos para saldar una asignatura pendiente
La mesa dispuesta para la entrevista es testigo de la locuacidad de David Trezeguet. En el momento que comienza la charla se le iluminan los ojos cuando se le pregunta por Villa Martelli. "Es mi lugar en el mundo. Casi todos los días, o día por medio, tengo que pasar por esos lugares donde fui tan feliz. Allí está mi infancia. Mis amigos. Mirá, es donde están los mismos potreros donde jugué de pibe, como se suele decir acá en la Argentina. Mi zona es Munro, Villa Martelli, Florida? Hasta que tomé la decisión de irme a Francia, mi vida pasaba por esas calles. Es donde me siento más normal. Quizá por eso haya decidido volver, los orígenes siempre tiran. ¿Viste?"
Su padre, Jorge Trezeguet, lo llevaba a jugar al baby fútbol en Colegiales y el club vecinal UVA, de Villa Adelina. Jorge Trezeguet jugó en primera división en Chacarita y después de pasar por algunos equipos del ascenso, como Estudiantes de Caseros, Español, Deportivo Italiano y Almagro, se le abrió la puerta para jugar en Al Rouen, Normandía. Allí nació David Trezeguet, el 15 de octubre de 1977. Casi no tiene recuerdos de su infancia francesa, pues cuando estaba por cumplir los tres años, su familia regresó a Villa Martelli. "Me siento argentino. Me fui porque con los contactos de mi viejo se me abrieron muchas puertas al poco tiempo de mi debut en Platense. Futbolísticamente tengo genes argentinos moldeados en Francia. Lo que uno incorpora de pequeño te acompaña toda la vida, por eso me siento a gusto en este regreso", cuenta quien debutó en Platense a los 16 años y después de cinco partidos fue a probarse en Mónaco.
Mueve los dedos y los lleva a su cabeza casi todo el tiempo para acompañar sus frases. Y se explaya en la entrevista con La Nacion, tras la presentación de sus botines de la marca deportiva Topper. "Haber regresado al fútbol argentino fue como volver a vivir en lo deportivo. Me volvió el fuego al cuerpo. Antes de venir al país estaba en otra cosa y pude alcanzar el sueño de vestir la camiseta de River y de poder dar mi contribución para un sueño que debe concretizarse (sic), uy, perdón, concretarse con el ascenso."
-¿Es cierto que estabas a un paso de retirarte?
-Estaba cerca. Venía de dos años malos en lo profesional y de una etapa poco clara en Emiratos Árabes. Estaba perdiendo motivación para salir a la cancha hasta que vine a la Argentina... Un par de partidos como espectador me despertaron un cosquilleo interior. Entonces mi tío le acercó el teléfono a un dirigente y se dio el primer contacto. Después me junté con Matías [Almeyda], al que enfrenté en Italia, y en poco tiempo entendí que podía ser útil al equipo. Y a partir de esta historia mutua es que comenzamos a pensar en el regreso.
-¿Que le dijiste a tu familia cuando decidiste venir a la Argentina?
-Ellos están en Montecarlo. Tanto mis padres como mi mujer y mis hijos. Cuando les dije que regresaba a la Argentina para jugar al fútbol no entendían mucho lo que pasaba, pero se dieron cuenta de la motivación que me despertaba jugar en el fútbol argentino y nada menos que en River. Creo que vieron lo mal que estaba hace unos meses cuando me venía el bajón, como dicen acá.
Trezeguet tiene a su mujer, que se ocupa de llevar adelante un local de ropa que la familia tiene en Montecarlo, allí donde sus hijos Aaron y Noraan van a la escuela. Y en esa ciudad, donde dio sus primeros pasos profesionales en Mónaco, forjó una amistad con Marcelo Gallardo, a quien todo el tiempo le hacía preguntas acerca de River. "Cada vez que tenía descanso en Europa, me venía para Argentina y me iba al Monumental como un hincha más. Iba con mis amigos a vivir algo que no se da en la misma dimensión en Europa. Con lo positivo y lo negativo que puede llegar a tener, el fútbol argentino es pasión. Hay una conexión sentimental con la gente que no se da en ninguna otra parte del mundo", continúa David, a sus 34 años, quien como cualquier hincha estuvo presente en el Monumental el día que se decretó el descenso millonario frente a Belgrano.
-¿Cómo te trata el fútbol argentino que tanto destacás?
-Maravillosamente. El afecto de la gente es algo que no voy a olvidar jamás. Acá los hinchas te entregan el corazón. Son muy pasionales. La gente de River es impresionante, creo que tiene expresiones que ningún otro equipo puede equiparar.
-En cuanto al juego, ¿qué te pareció la B Nacional?
-Tiene un nivel de juego muy exigente. No lo conocía y, para ser sinceros, no esperaba que fuera tan parejo. Y en el medio me encontré con el mundo River, con todo lo que exige y lo que demanda.
-¿Están sintiendo la presión que les impone conseguir el ascenso?
-Tenemos que afrontarla. Tenemos que manejar la presión para que no nos juegue en contra. A veces, entre mis compañeros, cuando sale el tema les digo: "Si hablan de presión por tener que jugar con un Monumental repleto de tensión, no se imaginan lo que es jugar en un cancha en la que te están viendo 30 personas".
-¿Cómo imaginás los tres partidos que quedan para definir el ascenso?
-Duros, como todo el campeonato. Sabemos que nos esperan los partidos más difíciles de la historia de River. Somos conscientes de que todos lo equipos nos quieren ganar. Quedan tres finales y estamos preparados. Nuestro objetivo es el ascenso y vamos a dejar todo para que River vuelva al lugar que merece su historia.
-Los hinchas aplauden cada vez que tocás la pelota de primera y limpiás la jugada, ¿lo notaste?
-Sí. El hincha de River aprecia el fútbol ofensivo. Mi juego tiene poco contacto con el defensor y mucho contacto con el balón a un toque. Jugar simple es algo que se valora entre los hinchas de River y mi estilo parece tener algún punto de contacto con el paladar millonario.
Trezeguet fue campeón del mundo con Francia en 1998 y volvió al país para vestir la camiseta de sus amores y para devolverla a primera. "Para lograrlo, vamos a dejarlo todo". River así lo espera.
DIXIT
"A mí me gusta la presión, porque la tienen los grandes equipos y este club es un grande. Por lo que vi en estos meses, no hay ningún equipo como River que lleve tanta gente. En lo pasional, No se compara con nada que haya vivido"
"Firmé por dos años y medio y me gustaría terminar mi carrera en river, aunque depende de muchos factores. Quería demostrar que estaba capacitado para jugar en este club, que es único, y cumplí mi sueño de vestir esta camiseta"
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Los goles que anotó David trezeguet en los 16 partidos que disputó con la camiseta de river
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Los títulos que acumula en su carrera. 8 con juventus, 4 con mónaco y dos con la selección de francia