Rally Dakar. Accidentes, pilotos en coma inducido y abandonos en el exigente territorio saudita

Tan apasionante como peligroso. El Rally Dakar dejó su tercer accidente de consideración entre los motociclistas en la aventura 2021. La octava etapa de la competencia, entre Sakaka y Neom, un recorrido de 375 kilómetros de especial y 334 km de enlace, resultó una trampa para el francés Xavier de Soultrait, que fue trasladado al hospital de Tabuk, al sudeste de Arabia Saudita, para someterse a un balance radiológico y determinar el alcance de las lesiones. A diferencia de sus compañeros de ruta, su compatriota Pierre Cherpin y el indio Santosh Chunchunguppe Shivashankar, que fueron inducidos a comas farmacológico, el galo, de 32 años, no perdió la conciencia.

Cuarto en el clasificador general, De Soultrait pretendía escalar hasta las posiciones del podio y recortar la diferencia con el puntero, el chileno José Ignacio Cornejo (Honda), cuando la caravana alcanzara las orillas del Mar Rojo. Puntero en la cuarta etapa, entendía que tenía las prestaciones y el manejo, tanto como una eficiente lectura del roadbook, para aspirar a convertirse en un nuevo ganador del Rally Dakar. El abandono en 2020 parecía ser un recuerdo amargo superado, tras los parciales que enseñaba el piloto que en 2021 debutaba con una moto Husqvarna, después de siete temporadas con Yamaha.

"Este año quiero estar en la vanguardia de la carrera, sé que puedo estar adelante. Después tendremos que tener paciencia, porque sabemos que en un Dakar puede pasar cualquier cosa", le confiaba a la página oficial de la carrera el piloto francés, padre de dos hijas. Todo se derrumbó con la caída, un final abrupto y lacerante para quien tenía como reto ganar la competencia.

Dos pilotos en comas inducidos

Un día antes, durante el recorrido de la etapa 7, la que unió las ciudades de Ha’il y Sakaka, Pierre Cherpin se estrelló en el kilómetro 178, cuando el el total fue de 837km. El resultado del golpe fue más crítico, al sufrir un traumatismo craneal por el que debió ser trasladado a un hospital de Sakaka para ser intervenido de urgencia.

Las informaciones de France TV señalaron que se encuentra en coma inducido después de la operación para reducir el hematoma extradural en su cerebro, aunque el piloto, de 52 años, también padeció un neumotórax y la fractura de una costilla.

Los primeros en asistir al francés fueron el chileno Francisco Chaleco López y su copiloto Juan Pablo Latrach, que a pesar de ser líderes en la categoría SSV no dudaron en prestar colaboración al herido; la organización le devolvió el tiempo que estuvieron detenidos y se mantienen al frente del clasificador general, después de la octava etapa.

Tres veces participante de la competencia, cuando la misma se desarrollaba en Sudamérica, Cherpin, que es un piloto amateur y corre en la categoría Original by Motul –sin asistencia-, hizo un descanso desde 2015 para reaparecer en 2021. "Soy un aficionado, no voy a ganar ni a subir al podio, sino a vivir una aventura, a descubrir paisajes que nunca hubiera tenido la oportunidad de ver", comentaba antes de emprender la exigente competencia el francés.

El primer golpe crítico del Rally Dakar lo protagonizó Santosh Chunchunguppe Shivashnkar en los primeros kilómetros de la cuarta etapa(Wadi Ad-Dawasir-Riyadh), un recorrido que es un camino hostil y devastador para el equipo Hero. Un año atrás, el 12 de enero de 2020, la misma pista, aunque en sentido inverso, fue escenario de la etapa 7, donde murió tras un accidente el motociclista portugués Paulo Goncalves, integrante del team indio, que tras el trágico desenlace abandonó la carrera.

Para evitar que se agite, CS Santosh fue inducido a coma farmacológico, aunque la evolución del traumatismo cranoencefálico, producto de la caída en un camino de grava sinuosa y empedradas entre montañas, resultó positivo y los médicos del hospital de Riyadh, donde fue trasladado, sugirieron evitar una intervención quirúrgica, después de analizar los últimos estudios a los que se sometió el piloto, de 37 años.

En 2015, CS Santosh se convirtió en el primer piloto de su nacionalidad en competir en el Rally Dakar: no solo comenzó la aventura, la terminó y así convenció al gigante Hero –la marca de motos más vendida de la India– a apoyar su carrera. Hasta los 16 años, nunca se había interesado por el deporte motor y tampoco algún integrante de la familia.

El señor de los rallies, out

Cuarenta y cinco vehículos abandonaron el Rally Dakar, después de ocho etapas. En la última, la desazón más significativa la protagonizó Sebastien Loeb, nueve veces campeón mundial de rally (WRC), pero que todavía no conoce la gloria en la exigente aventura dakariana, tras cinco presentaciones. Dos pinchazos en menos de 100 kilómetros terminaron con la ilusión del francés y su copiloto Daniel Elena, quienes desde el comienzo tuvieron que sortear obstáculos al punto de retrasarse a más de 13 horas de diferencia del líder Stepehen Peterhansel.

Era la primera vez que el piloto recorría el desierto saudita, ya que se ausentó en 2020. "Debemos abandonar el Dakar con la muerte en el alma. Estamos decepcionados, pero tenemos muchas lecciones que aprender de esta edición para volver con más fuerza el próximo año", escribió en las redes sociales Loeb.

También los argentinos sufrieron una nueva baja, con la deserción del mendocino Franco Caimi (Yamaha), a causa de la rotura del motor. Cinco motociclistas abandonaron en la etapa 8. Ahora son tres los pilotos nacionales que quedaron sin posibilidad de continuar en la aventura, después de las salidas de Orly Terranova (Mini) y Santiago Hansen (Yamaha Raptor 700). Entre los candidatos en la categoría cuatriciclos, Nicolás Cavigliasso, que marchaba puntero, rompió el embrague, una parte del quad que fue puesto a nuevo el día de descanso, y debió engancharse bajo la modalidad Dakar Experience y así reconocer el territorio para el futuro.