Hay que hacer todo perfecto
PALMERSTON NORTH, Nueva Zelanda-. ¡Estamos felices! Llegamos a los cuartos de final. Cumplimos con el primer objetivo que nos planteamos y por eso estamos muy contentos. Es un logro muy importante el que alcanzamos. No es fácil para un país como la Argentina clasificarse por segunda vez consecutiva entre los mejores ocho equipos del mundo. Para mí, esta es la tercera vez; así es espectacular.
Pero lo logramos sin jugar bien. Esa es nuestra nueva meta: crecer como equipo y jugar bien. Frente a los georgianos pasó lo que históricamente les pasa a los Pumas cuando somos favoritos, lo que ocurre cuando pasamos una semana tranquila, en la que todo el mundo habla bien y nos palmean la espalda. Cuando eso pasa, nos creemos más de lo que somos y evidentemente, cuando jugamos al 80 o al 90 por ciento, no nos alcanza. A nosotros sólo nos sirve jugar al 100 por ciento. Más ahora, que se vienen los All Blacks, uno de los mejores equipos del mundo, que juega de local y hace 24 años que no sale campeón.
Esta semana tenemos que mirar mucho los videos y ser muy exigentes. Tenemos que ser muy autocríticos; ante Georgia, por ejemplo, individualmente erramos mucho. Estuvimos mal en el contacto y la gestión con el pie fue mala. A los All Blacks tenemos que analizarlos hasta el último detalle. Si queremos ganar, no podemos errar en nada. Tendremos que estar al 110 por ciento y hacer todo perfecto. Pero se les puede ganar. Es buenísimo jugar acá, en Nueva Zelanda, contra ellos. No veo mejor partido que éste. Es el que queremos jugar todos.
Lo que se logró ayer es muy meritorio. Respondimos por arriba de las expectativas que todo el mundo tenía puestas, porque nosotros creíamos que nos íbamos a clasificar. Es un objetivo, pero no nos conforma. Nosotros teníamos casi una obligación moral de meter a la Argentina entre los ocho mejores, sobre todo los más grandes del equipo. No nos queríamos ir sin dejar a la Argentina bien parada, habiendo hecho un papel digno y respetando los valores que sabemos que son de los Pumas.
Tenemos una semana para prepararnos para lo que será el próximo objetivo. Debemos trabajar más fuerte e intensamente que nunca para enfrentar a los All Blacks. Ninguno de los que están acá tiene intención de hacer un papelón. Pese a que con Georgia no se jugó como esperábamos, fue un partido muy importante para el grupo. Nosotros creíamos que esto se podía dar, y se dio. Estamos entre los ocho mejores equipos del mundo, y eso tiene un valor impresionante. Ahora vamos por Nueva Zelanda y, como en el resto de los partidos, va a depender de nosotros.
El autor es jugador de los Pumas
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