El sector privado de ambas cadenas buscará presentar alternativas al Gobierno en los próximos días
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Las Mesas de Trigo y Maíz pedirán una reunión al Gobierno -se cursará una solicitud de audiencia al ministro de Agricultura, Julián Domínguez, y al secretario de Comercio Interior Roberto Feletti- para expresar que la creación de un fideicomiso con aportes privados para subsidiar las ventas de harina, fideo y pollo no es el camino ideal y existen otras alternativas para hacer eso. En esa línea, quieren acercar propuestas que apuntan más a sostener la demanda de sectores vulnerables -como a través de la tarjeta de alimentos Alimentar- y facilitar la compra de mercadería de la industria que transforma esos granos en alimentos. En este marco, las mesas sectoriales cuestionaron el control de precios del Gobierno.
Según pudo saber LA NACION de diversas fuentes, en un encuentro que se prolongó por más de dos horas esas mesas, donde confluyen desde productores a sectores industriales, plantearon que el fideicomiso “no es lo ideal”. Allí se habló de experiencias anteriores que no funcionaron, como las compensaciones que pagó el kirchnerismo en su momento y que terminaron en escándalo por irregularidades.
Pero, además, en la reunión se dejó en claro que productos como el trigo y el maíz tienen una incidencia sobre los productos finales que no van más allá del 20% (en enero último la Bolsa de Cereales de Buenos Aires habló de una incidencia del 13% del trigo en el pan y, entre otros productos, del 21% del maíz en el pollo). Esto quiere decir, dicen en el sector, que la causa de las subas de precios abarcan otras variables que van más allá de las materias primas.
Como contó este medio, el Gobierno apunta a crear un fideicomiso por unos US$150 millones que solventarán las exportaciones de trigo, maíz y sus productos derivados. Funcionará hasta 2024 y será para pagar compensaciones por el pollo, la harina de un kilo y la bolsa de 25 kilos de harina para panadería. Habrá un Consejo Ejecutivo que manejará el fideicomiso. Recibirá plata en función de las declaraciones de exportaciones. La Federación Argentina de la Industria Molinera (FAIM) y el Centro de Empresas Procesadoras Avícolas (CEPA) ya estuvieron con el Gobierno y quedaron en analizar el mecanismo.
Según pudo reconstruir este medio, en la reunión de hoy los diversos eslabones de la cadena abordaron los problemas que afectan a cada una. Hubo coincidencias de que un factor influye de manera negativa: el control de precios. Hay precios congelados para los alimentos mientras otros costos siguen subiendo por el ascensor. Extra costos incluso muy por arriba de la materias primas básicas como el trigo y el maíz.
“El control de precios está afectando a todos”, dijo una fuente consultada. “Cada uno expuso la situación ante el apriete que representa el control de precios”, agregó.
En ese marco, se coló el tema del fideicomiso que ya está preparando Agricultura y del cual también se sumarán las carteras de Desarrollo Productivo y Economía. Por ello, en el encuentro se plantearon “reparos” a la creación del fondo no solo para evitar experiencias del pasado que no funcionaron sino porque las materias primas tienen un menor peso sobre los productos finales.
En un comunicado, las Mesas Intersectoriales de Maíz y Trigo señalaron que “desean reiterar su vocación de trabajo para evitar medidas intervencionistas o distorsivas en los mercados de producción, consumo y exportación”.
Añadieron: “Por ello, analizado el tema en una reunión conjunta, acuerdan expresar su rechazo a mecanismos como el propuesto por el gobierno nacional de forzar la creación de un fideicomiso de trigo y de maíz que ha trascendido por diferentes medios. Las Mesas reiteran que el gobierno debe trabajar sobre las reales causas de la inflación que exceden al precio del maíz o del trigo, los cuales estuvieron siempre por debajo del ritmo inflacionario durante todo el 2021″. Después precisaron que “cuestionan la política de precios que está llevando a cabo la Secretaría de Comercio que autoriza ajustes de precios siempre por debajo del aumento de los costos de producción y de la inflación anual”.
En otro tramo del comunicado, las mesas del trigo y el maíz remarcaron que “desean acercar a las autoridades nacionales una serie de propuestas que incluyen desde la utilización de mecanismos de cobertura, financiación y, sobre todo, propuestas para llegar a los sectores de bajos ingresos o desocupados a través de tarjetas de alimentos”.
Lo que viene
Vale recordar que el secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, fue el primero en imponer públicamente la idea de hacer un fideicomiso. Su espejo es el fideicomiso por el aceite que los mismos exportadores compensan por US$190 millones. Una de las diferencias, explican en el sector, es que en ese fideicomiso hay menores actores que los presentes en las cadenas de trigo y maíz.
En este contexto, una fuente señaló: “Vamos a ir con una propuesta, insistir que se subsidie a la demanda”. El sector privado cree que, en lugar de tomar una medida el Gobierno que afecte luego a la oferta, directamente se debe actuar sobre la demanda. Esto mismo ya plantearon algunos como alternativa cuando de manera intempestiva el Gobierno puso el cepo a la carne.
Para Elbio Laucirica, vicepresidente de Coninagro, “hay que hacer un abordaje conjunto porque hay malestar en distintos sectores” de la cadena. Lo dijo en relación a la propuesta del fideicomiso del Gobierno. Coincidió con otras fuentes que hay “reparos” justamente a esa iniciativa del gobierno por experiencias que no funcionarios. También porque trigo y maíz tienen una incidencia menor.
Laucirica destacó el valor de la mesas sectoriales: “Son útiles para buscar soluciones con todos los sectores”.
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