Los alfiles bonaerenses

El sistema de puertos de la provincia de Buenos Aires cuenta con cuatro enclaves marítimos y cuatro fluviales y representa el mayor complejo portuario público del país.

El gran dinamismo del sistema convive con distintos modelos de gestión para su gerenciamiento, de hecho, la provincia tiene cinco consorcios (entes públicos no estatales) para su administración portuaria, en los puertos de Bahía Blanca, Quequén, Mar del Plata, La Plata y San Pedro.

Por su alta implicancia en la comunidad portuaria, los consorcios cuentan con la representación de los distintos sectores de la cadena productiva en sus directorios: los productores primarios, la comercialización, los trabajadores y los representantes de los servicios portuarios, por un lado, y la participación de representantes públicos por la provincia de Buenos Aires y los municipios donde se encuentran emplazados, por el otro. Todos participan en la toma de decisiones.

Algunos consorcios han sido creados por decreto, mientras que los puertos de Quequén y Bahía Blanca lo fueron por la ley 11.414.

Dos décadas después de la transferencia de los puertos, desde la Nación hacia las provincia (ley 24.093), la oferta portuaria disponible ha venido respondiendo a las necesidades planteadas por el comercio internacional de la Argentina.

Los puertos administrados en forma directa por la provincia son los de Dock Sud, la Delegación Paraná Inferior, el de San Nicolás, el de Coronel Rosales y el de Olivos.

Obras generalizadas

Todos los puertos bonaerenses están realizando obras estructurales o de infraestructura que mejoran la capacidad de los puertos públicos. En materia de dragado y profundización, el puerto de Bahía Blanca suscribió un contrato para profundizar a 50 pies su calado y un ensanchamiento del vaso portuario de 80 metros. Prevé también un mantenimiento plurianual para los 97 kilómetros de canal de acceso al estuario de Bahía Blanca.

En Mar del Plata se suscribió el contrato para el dragado de la solera de ingreso, afectado por un banco de arena, que era una demanda de la comunidad portuaria marplatense. Por su parte en el Puerto La Plata, la terminal Tecplata que se inaugurará el mes próximo, ampliará la oferta de contenedores con una nueva localización. También ejecutaron obras de dragado para facilitar la operatoria.

El puerto de San Pedro realizó en el primer semestre las tareas de mantenimiento de su canal, que quedó en óptimas condiciones operativas. En tanto, a fines de septiembre se abrieron las ofertas para el dragado del canal sur y las secciones interiores del puerto de Dock Sud.

Por su parte, el puerto de Quequén también tiene su proceso administrativo para el dragado del canal de acceso y profundización, y firmó con empresas nacionales la construcción de una nueva terminal portuaria denominada Giro 0, que elevará las posibilidades de elevación de granos. Y el puerto de Coronel Rosales tiene garantizado su calado, por el término de cinco años, también con compromisos plurianuales.

El total de carga registrada operada durante el año último en el complejo portuario de la provincia de Buenos Aires, superó las 59,3 millones de toneladas.

Todos los nichos

La provincia, con una oferta bien diversificada

• Contenedores y combustibles.
  
  Casi todos los nichos de productos están incluidos en el registro de carga de los puertos bonaerenses. Los contenedores y los combustibles participan especialmente en Dock Sud

• Granos y economías regionales.
  
  Bahía Blanca y Quequén son especialistas en el completamiento de bodegas cerealeras. San Pedro, en tanto, atiende muchos cítricos y arroz

Jorge Otharán