
El Lloyds se sumó a las compras
Compra: la entidad inglesa adquirió el Banco Comercial de Tres Arroyos en el marco de lo que presentó como su plan de expansión.
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El Lloyds Bank se quedó ayer con el Banco Comercial de Tres Arroyos en el marco de una operación que la entidad inglesa presentó como el comienzo de su plan de expansión en banca minorista a partir de su llegada importantes ciudades del interior del país.
La entidad había anunciado hace unos días que planeaba "duplicar su red de sucursales en los próximos años" como parte de una estrategia para profundizar su concentración en el negocio minorista. La compra del Tres Arroyos, una pequeña entidad pero con agresiva presencia en su ciudad de origen, parece ser el primer paso.
La compra, cuyo monto no se informó pero rondaría los 80 millones, busca además brindar una clara señal hacia el resto del mercado financiero, luego de que innumerables rumores presentaron durante varias semanas a la entidad inglesa como una más entre tantas vendedoras. Las versiones al respecto arreciaron cuando el Lloyds se desprendió de su emblemática casa central (un característico edificio de la City construido por el arquitecto Clorindo Testa), la que vendió al Banco Hipotecario en aproximadamente 20 millones de dólares.
Desde la entidad buscaron enfrentar la ola de rumores anunciando una futura expansión que ahora, tal vez convencidos de que los hechos valen más que las palabras cuando se trata de dar señales contundentes, la gente del Lloyds se apresuró a cerrar su primer negocio en el intento por ensanchar su porción de mercado.
Los unos y los otros
Colin Mitchell, gerente general del Lloyds, destacó que esta compra le permite al banco expandir sus negocios "incorporando a una importante comunidad como Tres Arroyos a las actuales operaciones que ya realizamos en Mar del Plata y Bahía Blanca. De esta forma estamos en mejores condiciones de cubrir una de las áreas más ricas y productivas de la provincia de Buenos Aires".
Mitchell admitió recientemente que los negocios minoristas representan "más de la mitad de los ingresos del banco". "Hace cinco años estábamos más enfocados en banca corporativa, pero su rentabilidad ya no es muy interesante", dijo recientemente a la agencia Reuters.
Desde Tres Arroyos justificaron la venta, que anoche se anunciaba oficialmente en esa ciudad, como una consecuencia directa de la "concentración e internacionalización que muestra el sistema", destacaron en un comunicado.
La operación, que aún está sujeta a la aprobación del Banco Central, no cambia de manera importante los números locales del Lloyds, que es el mayor banco minorista del Reino Unido y lleva 135 años de actuación en la Argentina, pero le permite modificar su imagen ante el mercado que lo observaba como "a la defensiva".
El banco inglés incorpora así unos 10 mil ahorristas, suma tres filiales y se asegura la llegada a dos nuevas ciudades del interior (Tres Arroyos y Claromecó). Pero no modifica su 25º puesto en el ranking por depósitos de entidades financieras.
Asimismo, revela una selectiva estrategia de crecimiento, que lejos de la espectacularidad, parece privilegiar la llegada a ciudades del interior con fuerte potencial de crecimiento en cuanto a tasas de bancarización.
Para el sistema implica la absorción de otra pequeña entidad regional a manos de una entidad extranjera, con lo que aumenta la internacionalización de la banca local.
Los grandes ahorristas controlarían el BCP
Horas clave: discuten con el BCRA por el futuro de la entidad, en tanto el Banco Provincia reveló ayer que apoya la propuesta del grupo Yarur.
El Banco Central (BCRA) y los grandes ahorristas del Banco de Crédito Provincial (BCP) discutían anoche una nueva propuesta de la entidad monetaria para definir la suerte de la institución suspendida, cuyo destino final debe resolverse el próximo jueves.
Ayer la discusión se centró en la contrapropuesta que realizaran el viernes los grandes ahorristas para tomar el control de la entidad y capitalizarla comprometiendo en esa misión parte de los fondos ahora inmovilizados en el banco.
El BCRA habría aceptado esa posibilidad, siempre y cuando los grandes ahorristas presenten una propuesta completa (con directorio, accionistas y avales) para manejar el banco y se comprometan en mantener por tres años una parte de los depósitos.
El monto en disputa son alrededor de 130 millones de pesos en colocaciones no garantizadas, de los cuales 90 millones corresponden a grandes depositantes (con montos superior a los 500 mil pesos). La mayor parte de esa suma, 70 millones (30 en depósitos y 40 en una Obligación Negociable) se le adeuda al italo-norteamericano Francesco Comforti, líder del grupo que resiste la propuesta de la empresa Yarur, que en Chile controla el Banco de Crédito industrial (BCI), según la cual se le reintegraría a estos ahorristas sólo el 10% de su dinero en efectivo y el resto en bonos.
El resto de los ahorristas del BCP tiene asegurada la devolución de sus ahorros, que totalizan más de 100 millones de pesos, por parte de Seguro de Depósitos (Sedesa), aún en el caso de que se decrete la quiebra de la entidad.
¿El Provincia llega tarde?
"El Banco Provincia elevó la semana pasada un nota al Banco Central por la cual se aceptaba la condición de prestarle a los posibles compradores del Banco Crédito Provincial (con referencia al grupo Yarur) alrededor de 27 millones de pesos con garantía de inmuebles y otros 32 millones en fideicomiso", reveló ayer el ex titular del Banco Provincia, Rodolfo Frigeri.
De esta forma por primera vez el Banco Provincia dio a conocer el avance de las negociaciones con el grupo chileno Yarur, el único oferente por el BCP y cuya presentación podría no ser tenida en cuenta por el Banco Central (BCRA) habida cuanta el persistente rechazo de los grandes ahorristas a la propuesta de los chilenos El actual diputado por el PJ bonaerense informó que también se baraja "la opción de comprar con esos 32 millones algunos edificios y empresas que nos interesan", pero admitió que, al no haber avances en las negociaciones con los grandes ahorristas de la entidad fallida, el Provincia espera ahora "que se proponga otra alternativa".





