Duelo laboral: la fórmula para superar un despido
Cuando se pierde un empleo es muy común caer en la autoconmiseración por un tiempo. Pero por bien que se sienta tomarse un tiempo de descanso merecido, cuanto antes se supere la pena y se vuelva al yugo será mejor para la carrera profesional.
El primer paso es reconocer las emociones. Inmediatamente después de que la echaron, una persona puede sentirse una variedad de emociones, que van desde el pánico por quedarse sin una entrada regular hasta el entusiasmo que implica abrazar la vida sin una rutina fija. Pero en lugar de quedarse atrapado por estas emociones, lo mejor es concentrarse en el futuro.
En segundo lugar, no hay que tener miedo de contar lo que pasó a todo el mundo, incluyendo desconocidos.
Aunque puede sentir la tentación de mantener su estatus en secreto, los amigos y familiares no pueden ayudar si no son conscientes del hecho. Hacer saber a la gente que está disponible para nuevas oportunidades es el primer paso en la búsqueda de un empleo.
El desempleo también es una buena oportunidad para invertir en el desarrollo personal. Destinar dinero a la formación en principio puede parecer que no es lo más recomendable en una situación de este tipo, pero hay que recordar que el dinero llama al dinero.
Si inscribirse en uno o dos cursos lo convertirá en un candidato más vendible y se cuenta con los fondos, hay que hacerlo. Si se necesita ayuda para mejorar el CV o se considera que la mejor opción es contactar a un asesor en carreras o recursos humanos, hay que tomarlo como una inversión.
Elizabeth Alterman y Fast Company