Finanzas personales: cuáles son los mejores destinos para viajar con el nuevo dólar

El peso argentino se devaluó un 40% en el último mes. Cualquier libro de economía indicaría que en un país en el que la moneda perdió valor, lo que sucede inmediatamente es que aumenta el turismo interno y baja la salida al exterior. Pero en la Argentina en la que se rompen todas las reglas, esta hipótesis tampoco se cumplió.

¿Por qué con un dólar más caro, Buzios y Punta del Este volvieron a ser el reinado de los argentinos mientras en la costa atlántica hay una vacancia que ronda el 30%? Son varias las razones: a la devaluación del peso se suma la salida del cepo, la eliminación de las retenciones y el movimiento internacional que fortaleció la divisa estadounidense. Todo esto cambió el mapa de los destinos a los que es más conveniente viajar con el nuevo dólar libre.

"Si se compara el último mes, la relación de las monedas cambió muy poco, pero como toda la región tuvo una fuerte depreciación frente al dólar, el cambio en el último año es significativo en casos como Brasil, Colombia, México o Uruguay", explica Adrián Yarde Buller, economista del estudio Ferreres.

El impacto de la eliminación de la retención a cuenta de Ganancias y Bienes Personales también juega un rol. Para todo el universo de viajeros que pagaba ese cargo del 35%, pero no podía recuperarlo, la devaluación efectiva a la hora de subir a un avión es de sólo el 5%. Si a eso se suma que el real se devaluó por encima de ese porcentaje, el turista argentino sale ganando.

Caipirinha barata

Brasil es el ejemplo más claro. Para quien pagaba el cargo y no lo recuperaba, comprar un real le costaba 4,6 pesos (3,22 pesos por real más el cargo del 35%) el 12 de enero de 2015. En cambio, el mismo día de este año sólo debe desembolsar 3,4 pesos para hacerse de un billete brasileño en una cálida playa de arenas blancas. "Como lo que aumentó el dólar por la devaluación lo bajó por la eliminación del impuesto, todo lo que se abarataron los países de la región lo ganó el turista, y con Brasil eso ya se sentía en la última etapa de 2015 y se consolidó este año", asegura Marcelo Grether, director comercial de la agencia de turismo Avantrip. Para dimensionar el impacto, el ejecutivo revela un dato: la participación como destino en las ventas de la agencia se duplicó en el último año. "Hasta mediados de 2015, Brasil representaba el 10% de nuestras ventas y hoy está en el 20%", cuenta.

¿Qué otros destinos están más baratos? En Uruguay, el año pasado comprar un peso de ese país costaba 0,50 pesos argentinos y este año cuesta 0,45. En México, en enero de 2015 hacerse de un peso mexicano costaba 0,80 pesos argentinos, mientras que este año con 0,77 pesos se consigue el mismo billete. En Colombia se repite el caso.

Pensando en destinos más lejanos, del otro lado del Pacífico, en Nueva Zelanda la relación del peso contra el dólar neozelandés con la carga del 35% era de 9 a 1, mientras que este año basta desembolsar 8,63 pesos para comprar la moneda local. "La devaluación en la Argentina, además, quedó por debajo del valor del dólar blue. Por lo tanto, para aquellos que utilizaban esa moneda para viajar, los costos son todavía menores esta temporada", agrega Yarde Buller.

En tanto, los Estados Unidos, Suiza y Japón aparecen como los destinos más caros para viajar. El dólar se apreció un 57,9%, el franco suizo un 60,7% y el yen un 58,8% en el último año. De todas maneras, para Gretcher eso no frenará el flujo de argentinos que viajan a los Estados Unidos y a los destinos más demandados de ese país, como Orlando, Miami y Nueva York. "Son turistas que pagan un ticket alto y lo que miran es que tengan financiamiento disponible. Mientras haya cuotas, este aumento de precios no los va a frenar", dice.

El experto agrega que el destino que podría potenciarse para los argentinos es Europa. En los últimos meses viajar al Viejo Continente fue complicado por la escasa oferta de pasajes que generó la limitación del cepo. En el nuevo escenario se combinan dos factores: la apertura local y la decisión de las aerolíneas europeas de buscar pasajeros en América del Sur, para compensar la merma de viajeros de sus países de origen como consecuencia de que el euro se devaluó frente al dólar. "En la temporada alta hay mucha demanda y los valores están altos, pero si esta relación de precios se sostiene, en la temporada baja, entre marzo, abril y mayo, los argentinos podrían encontrar muy buenas oportunidades para viajar", alerta Gretcher.

En contraposición, el ejecutivo explica que, aunque México devaluó el peso, el destino azteca más demandado que es Cancún está dolarizado, y sus precios no cambian en función de lo que pase con la moneda.

El peso se devaluó, pero para los viajeros todas parecen buenas noticias.