ELN, instrumento de Maduro
Durante las últimas dos décadas, Colombia ha denunciado la manera en que el Ejército de Liberación Nacional (ELN) utiliza la frontera con Venezuela como plataforma para sus ataques contra el país cafetero. La presencia del ELN en Venezuela es de vieja data.
La organización no gubernamental de monitoreo del crimen organizado InSight Crime (IC) logró identificar la presencia del grupo guerrillero en 12 estados de Venezuela y explicó que los guerrilleros están involucrados en diferentes actividades criminales, relacionadas con el ganado, la gasolina e incluso con extorsiones. El comandante de las Fuerzas Militares de Colombia, general Luis Fernando Navarro, señaló que unos 1100 miembros del ELN se refugian en Venezuela y que entre ellos hay miembros de su órgano de dirección.
El alto oficial señaló que el comandante guerrillero Gustavo Aníbal Giraldo, conocido como Pablito, permanece en el estado venezolano de Apure. Pablito, por quien el gobierno colombiano ofrece una recompensa de 1,3 millones de dólares, es el hombre fuerte y con mayor capacidad de fuego del grupo terrorista, según expertos.
El líder opositor venezolano Juan Guaidó, reconocido como presidente interino por más de 50 países, manifestó que "casi el 50% del ELN ya está operando en territorio venezolano". También el Grupo de Lima manifestó su preocupación frente a las actividades transnacionales que vienen realizando organizaciones terroristas desde territorio venezolano.
Según informes de inteligencia colombianos, la guerrilla también mantiene relación con el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin).
El ELN está directamente vinculado a la actividad de producción de cocaína y heroína en Colombia y se lo señala como el gran instalador de minas antipersonales con el objetivo de proteger los cultivos de la hoja de coca y de la amapola. Resulta repudiable que la dictadura de Nicolás Maduro no solo oprima a su pueblo, sino que sirva de resguardo a este grupo terrorista, ampare sus acciones y le sirva de escondite, en abierta complicidad con sus actos.