El gobierno francés niega un complot contra Strauss-Kahn
PARIS.- El gobierno francés y la cadena de hoteles Sofitel negaron ayer que hubiese habido un "complot" contra Dominique Strauss-Kahn, un día después de que un periodista norteamericano difundiera una investigación sobre el escándalo sexual que apunta a la posibilidad de que se hubiese querido perjudicar al ex jefe del FMI, entonces favorito para las elecciones presidenciales de 2012.
El ministro del Interior de Francia , Claude Guéant, un allegado del presidente Nicolas Sarkozy, desmintió enérgicamente toda idea de "complot" contra Strauss-Kahn, arrestado el 14 de mayo pasado en Nueva York y acusado de agresión sexual contra Nafissatou Diallo, una mucama del hotel Sofitel de Manhattan, donde acababa de pasar la noche.
Los cargos penales contra el ex director del Fondo Monetario Internacional (FMI) fueron desechados en agosto, pero el caso terminó con las ambiciones políticas del ex ministro socialista.
En una investigación publicada en la revista New York Review of Books , el periodista Edward Jay Epstein revela detalles de lo que supuestamente sucedió ese 14 de mayo en el Sofitel. En ese artículo se refiere, entre otros puntos, a la desaparición de un teléfono celular y a la alegría manifestada por empleados del hotel cuando salió a la luz el escándalo.
Epstein sostiene que se quiso perjudicar a Strauss-Kahn para "hacer descarrilar" su candidatura, pero no se refirió a un "complot político". Tanto el gobierno como el oficialista Unión por un Movimiento Popular (UMP) y la cadena de hoteles Sofitel, que pertenece al grupo francés Accor, trataron de poner fin a "los rumores" y a los interrogantes que plantean estas nuevas revelaciones norteamericanas.
"Leí el artículo del periodista Edward Epstein. ¿Qué es lo que destaca? Que DSK [Dominique Strauss-Kahn] perdió su teléfono. Que haya perdido su teléfono no significa que hubo un complot", dijo Guéant.
Epstein afirma que Strauss-Kahn fue advertido por una amiga la mañana del 14 de mayo que su teléfono celular, un BlackBerry, probablemente había sido hackeado, ya que uno de sus mensajes electrónicos privados fue leído en la sede del UMP.
Añade que ese teléfono se perdió y que hasta la fecha no ha sido encontrado, "ni por la policía ni por los detectives privados" contratados por los abogados de Strauss-Kahn.
Otro punto curioso en esta investigación: el jefe de los servicios técnicos del Sofitel fue filmado por una cámara de vigilancia cuando manifestaba bulliciosamente su alegría con otra persona, durante tres minutos, justo después de haber escuchado la narración de la agresión por parte de Diallo.
"En realidad, esos hechos duraron ocho segundos, sin que se constatara una «extraordinaria danza de celebración»", declaró ayer la cadena de hoteles en un comunicado.
Agencias AFP y ANSA
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