Un giro del Banco Central Europeo genera temores sobre la economía
La entidad redujo las previsiones de crecimiento para la eurozona y anunció que no aumentará las tasas de interés; prepara créditos baratos para estimular la recuperación
PARÍS.- Ante la persistente desaceleración económica de la zona euro, el Banco Central Europeo (BCE) anunció ayer su intención de no aumentar sus tasas directoras hasta 2020. Además lanzó una serie de préstamos gigantes y baratos para estimular la recuperación.
"Cuando uno está en la oscuridad, da pasos cortos. No puede correr, pero puede moverse", comentó el presidente de la institución, Mario Draghi, justificando una decisión unánime del Consejo de Gobernadores, que se adelantó a las previsiones de los mercados.
El BCE, que publicó ayer sus nuevos pronósticos macroeconómicos para la eurozona, redujo considerablemente sus previsiones de crecimiento para 2019, llevándolas a 1,1%, contra el 1,7% previsto en diciembre pasado. Para 2020, la institución espera un crecimiento de 1,6%, contra 1,7% precedentemente. La BCE también redujo sus estimaciones de inflación, fijándola a 1,2% para este año, contra el 1,6% original. Para 2020, prevé una inflación de 1,5%.
En ese contexto de morosidad, el Consejo de Gobernadores decidió pues dejar para el futuro la perspectiva de un primer aumento de sus tasas de interés. Según reza el tradicional comunicado, el BCE dejará las tasas a su nivel actual -las más bajas desde marzo de 2016- "al menos hasta fines de 2019", en vez de "al menos hasta el verano (boreal) de 2019", plazo que regía hasta ayer. La tasa de refinanciación del banco europeo se mantendrá entonces en 0% y la tasa de depósito en -0,4%.
Draghi insistió, sin embargo, en que la zona euro no está amenaza por una recesión, cuyo riesgo calificó de "escaso".
"El aumento de los salarios continúa, el mercado de trabajo sigue mejorando, el consumo se mantiene y las condiciones financieras se apaciguaron", enumeró.
Para explicar esa corrección, el presidente del BCE destacó la ralentización del comercio mundial, que pesa sobre la confianza, no solo debido a China sino también a la incertidumbre provocada por la actualidad geopolítica, como por ejemplo el Brexit o la guerra comercial lanzada por Estados Unidos. Pero también destacó las turbulencias de ciertos países emergentes y factores específicos en algunos países, como el golpe de freno de la industria automotriz alemana.
Coincidiendo con ese diagnóstico, tres instituciones internacionales redujeron a su vez las previsiones de crecimiento mundial: la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), el FMI y la Comisión Europea. En su esperado informe anual publicado anteayer, la OCDE anticipa apenas 3,3% de crecimiento mundial para este año y 3,4% el año próximo, después del 3,6% de 2018.
Los mercados habían anticipado, por su parte, esta decisión y no esperaban un cambio de tasas hasta el año próximo. Pero la institución manifestó así su determinación de estimular la coyuntura durante todo el tiempo que sea necesario.
"La decisión me parece inteligente y necesaria para atenuar la amenaza de una desaceleración económica", analizó Marcel Fratzscher, presidente del Instituto Económico Berlinés (DIW).
El BCE, que puso fin en diciembre a la compra masiva de deuda pública justo cuando la coyuntura europea comenzaba a degradarse, también anunció una salva de créditos gigantes a largo plazo para los bancos de la zona euro.
Con esta medida, la institución con sede en Fráncfort pretende evitar un endurecimiento de los préstamos a particulares y a empresas de la eurozona, asegurando a los bancos las condiciones de un financiamiento barato.
Los mercados, en todo caso, no fueron insensibles a las preocupaciones que llevaron al BCE a tomar estas nuevas medidas: el euro cerró ayer a su nivel más bajo de los últimos cuatro meses frente al dólar, mientras que los índices bursátiles también cayeron en picada.
Ajuste de números
1,1%
Crecimiento
- Las previsiones de crecimiento para 2019 habían sido estipuladas originalmente por el Banco Central Europeo (BCE) en un 1,7%, cifra que se redujo ahora a 1,1%; para 2020, el organismo estima un crecimiento económico de 1,6%
0%
Las tasas, sin cambios
- Al dejarlas en su nivel actual, la tasa de refinanciación del banco europeo será la más baja desde marzo de 2016; la tasa de depósito se mantendrá en -0,4%
1,2%
Inflación
- El 1,6% que se había calculado como nivel de inflación para 2019 caería a 1,2% al no haber aumento de tasas; para 2020, la inflación prevista es de 1,5%, frente al 1,7% estimado en el informe previo al dado a conocer ayer