De Bono a Lady Gaga: ¿cómo surgieron los nombres artísticos de las estrellas?

Varias décadas atrás se estrenó la publicidad de un banco cuyo eslogan era: "Un buen nombre es lo más valioso que uno puede tener". Y en el mundo artístico un buen nombre, aunque no garantice el éxito, ayuda a mejorar la performance en los índices de popularidad. No es lo mismo decir que la que logró en pocas horas un millón de views de su nuevo vídeo es Stefani Joanne Angelina Germanotta que referirse a ella simplemente como Lady Gaga.

A partir de la década del sesenta prosperaron en nuestro país los apodos y nombres artísticos en las carreras de actores, actrices y cantantes. Buscar un nickname en inglés los hacía más importantes. Ser Charly en vez de Carlos (o Charlie). Cambiar Ricardo por Richard, o Miguel por Mike. Dejar de ser Juancito y pasar a Johnny. A finales de los setenta apareció otra publicidad que decía que todo lo importado era mejor. Pero esa es otra historia. Veamos cómo surgieron estos apodos de artistas muy famosos.

Bono

El cantante de U2, Bono, fue bautizado como Paul David Hewson. Antes de ser el líder de uno de los grupos del rock y el pop más famosos del mundo tuvo una banda de adolescencia llamada Lypton Village. Fue en ese grupo en el que comenzó a ser llamado Bono Vox. Cuenta la leyenda que uno de sus amigos le dijo que era fundamental tener un buen nombre para ser parte de un grupo. La combinación no le habría gustado demasiado al cantante, pero se sintió mejor cuando supo que en latín Bono Vox significaba "buena voz".

Atahualpa Yupanqui

Héctor Roberto Chavero supo elegir pacientemente su nombre artístico. Pensó en lo que era, un caminador de la Argentina, y en lo que quería llegar a ser, un contador de historias. De ahí surgió el nombre Atahualpa Yupanqui, que en quechua hace referencia a aquel que viene de lejos para decir algo. Son dos voces que se construyen de esta manera: Ata ("venir"); hu ("lejos"), alpa ("tierra) y yupanqui (narrar o el que va a narrar). El narrador que viene de lejos. Nacido en un campo de la provincia de Buenos Aires, en 1908, fue el juglar que venía de lejos para cantar y convertirse en un prócer del folclore argentino. De Buenos Aires al Noroeste argentino. De Francia a Cerro Colorado, que eligió como última y eterna morada.

Edith Piaf

Fue (y probablemente lo siga siendo, a pesar de que partió hace más de 50 años) la voz más importante de Francia. Nació en París el 19 de diciembre de 1915 y la llamaron Édith Giovanna Gassion. Quizá los exceso de una vida plagada de nocturnidad no tuvieran mucha relación con los gorriones (Piaf). Sin embargo, esa fue la imagen que cruzó por la cabeza del gerente de un cabaret cuando la escuchó por primera vez. ¿Cómo podía salir de ese cuerpo diminuto semejante vozarrón? Louis Leplée, gerente del cabaret Gernys, la escuchó cantar y de inmediato la bautizó la "Môme Piaf", la "pequeña gorrión". Así nació al mundo Edith Piaf, la voz inolvidable de clásicos como "La vie en rose", "Non, je ne regrette rien", Hymne à l'amour" y "La Foule".

Lady Gaga

Gaga llamaron los sumerios a Plutón. Gaga sería abuela, en la lengua diné bizaad que hablan los navajos en los Estados Unidos. Gagá, con la "a" acentuada, dentro del habla castellana de muchos países sirve para referirse a una persona de edad adulta pero con rasgos seniles. Claro que nada de esto nos llevará al motivo por el cual Stefani Joanne Angelina Germanotta se hizo famosa como Lady Gaga. La teoría que seguramente más se aproxime a la realidad es de cuando Stefani trabajaba en un local del Lower East Manhattan, cantaba mucho el tema de Queen "Radio Gaga" y el productor Rob Fusari le sugirió el apodo con el cual hoy se la conoce en todo el mundo.

Bad Bunny

Benito Antonio Martínez Ocasio nació en marzo de 1994 en San Juan de Puerto Rico. Atesorar una fotografía de niñez donde se lo ve con orejas de conejo y cara de enojado y un CD de Vico C que le regalaron en aquel tiempo fue la combinación perfecta para que, ya veinteañero, se convirtiera en uno de los más exitoso representantes del reggaeton y el trap. Con esa foto en la mano y la traducción al inglés, Bad Bunny (que hasta parece un juego de palabras con Bugs Bunny, aunque no tenga que ver con esto) apareció la fórmula del éxito.

Bruno Mars

Bruno Mars nació en Honolulu, Hawái. Su apellido es Hernández pero su nombre artístico poco y nada tiene que ver con su procedencia. Tampoco con Los Ángeles, lugar adonde se trasladó en su juventud para hacer una carrera como cantante, meta que alcanzó hasta consagrarse como un reconocido artista del gran negocio de la música. Peter Gene Hernández habría sido apodado de pequeño Bruno por su padre, quien era admirador de un luchador italiano de la World Wrestling Federation (WWF), Bruno Sammartino. No había parecido físico. Quizá los uniera algún rasgo del temperamento de cada uno para conseguir lo que se proponían. El Mars tendría alguna relación con estar siempre con "la cabeza en otro planeta".

Pappo

Baluarte del blues y el rock metalero de la Argentina, Pappo supo forjar una personalidad que comienza en su nombre, sigue en su música (con bandas como Riff o proyectos en solitario como Pappo's Blues) y la pasión por los autos, hasta su muerte, en un accidente vial, cuando manejaba su moto. Nació como Norberto Aníbal Napolitano, el 10 de marzo de 1950. El primer apodo que recibió en épocas de colegio fue el apócope de su apellido: Napo. Luego se fue deformando hasta convertirse en Pappo. En el mundillo del rock también se lo llamó "El Carpo". Era una referencia a su habilidad para tocar la guitarra y su digitación. Por eso la referencia a uno de los huesos de la mano.

Maluma

Juan Luis Londoño Arias pudo haberse quedado con la combinación de sus dos nombres de pila si hubiera nacido varias décadas atrás. Habría sonado bien en los setenta y los ochenta, junto a otros artistas como Juan Gabriel o Luis Miguel. Pero este cantante colombiano es de otra generación. Nació en 1994. Debía buscar un apodo más acorde a estos tiempos. Maluma (inspirado en los nombres de su madre Marilí, su padre Luis y su hermana Manuela) sería mucho mejor. Y lo fue.