La mujer de Alberto Cormillot, sobre el embarazo: “Esto es lo más lindo que me pasó”

A poco de que Alberto Cormillot anunciara que su mujer, Estefanía Pasquini, estaba embarazada, la nutricionista usó las redes sociales para compartir su felicidad. “Esto es lo más lindo e importante que me pasó en la vida, y no podía ser con otra persona que no seas vos, Alberto Cormillot”, escribió junto a una imagen donde se ve su incipiente pancita.

A menos de dos años de dar el sí, la pareja decidió agrandar la familia y a pesar de no haber alcanzado aún los primeros tres meses de gestación, Alberto, de 82 años, decidió hoy compartir la noticia con el mundo, luego de una pregunta que le hizo Guillermo Andino al aire ayer. Esta mañana contó en radio Mitre que estaba esperando su tercer hijo. Más tarde, su mujer, de 34 años, recurrió a su cuenta de Instagram para expresar su alegría.

“De a poquito va saliendo...[en referencia a la panza] Será verdad eso de `deséalo tanto que la vida no tenga más remedio que dártelo´. Yo sé que además de desear mucho las cosas hay que buscarlas. Tengo miedos, mil o más. Esto es lo más lindo e importante que me pasó en la vida, y no podía ser con otra persona que no seas vos. Cuando llega eso tan deseado, da miedo, pero es mas fácil con una red de apoyo, mis papás, mi familia, mis amigos, diciendo que va a estar todo bien, todo el tiempo alentando, contando cada semana que pasa como una victoria. Compartiendo anécdotas que te hacen sentir menos bicho raro, que te cuidan, que te miman”, expresó la nutricionista.

Y agregó: “Muchos creen que es un me dejo de cuidar, viene el bebé, lo tenemos, fin... No, no es así, es más complejo. Yo cada día tengo una batalla contra los miedos, contra cosas que pasan que no tenía idea que iban a pasar. Pero todo vale la pena, porque no existe nada más grande que esto”.

Por último quiso sumar un mensaje para todas las mujeres que están en la búsqueda y no les está siendo tan sencilla. “Para todas las que buscan y creen, me encantaría hacerles llegar mi fe y mis creencias. A las dos semanas de ir a la virgen de la dulce espera (Villa Devoto), estaba embarazada... Yo necesito creer porque me da fe, esperanzas y me siento protegida y mandaría a cada persona que quiera ser mamá allá. No van a existir palabras en la vida para describir tanto amor”.