El Camarín de las Musas estrena la primera obra audiovisual dirigida por Veronese

Este año más que nunca, los límites entre las artes se cruzaron. Se mixturaron, se hicieron materiales híbridos entre los distintos lenguajes para poder continuar haciendo ficción. El teatro le pidió prestado a lo audiovisual algo de sus especificidades porque, al menos por un tiempo, la coexistencia en una sala estuvo vedada. Incluso ahora, llegando a fin de año, son pocas las salas que pueden abrir y permitir esa relación misteriosa que hace que una función nunca sea igual a la otra. Mientras llega la antigua normalidad que, incluso, hay consenso en considerar que nunca nada va a ser igual luego de tanto repliegue sobre uno mismo, los artistas buscaron cómo hacer para que el show continúe.

Desde el Camarín de las Musas -una sala emblemática del circuito independiente teatral de Buenos Aires-, impedidos para abrir porque las normas requeridas son excluyentes para muchas salas, se estrenó el jueves pasado la primera obra audiovisual, en formato cinematográfico. Se puede acceder desde la página del Camarín de las Musas, luego de haber comprado la entrada. Las obras de este ciclo llamado "Fotografías" van a durar 40 minutos y todas son escritas y dirigidas por Daniel Veronese y Mariano Saba y se irán estrenando desde la página, que desde la pandemia comenzó a albergar también al cine de autor. Ya está en proceso la escritura de la segunda obra que se llamará El cuaderno rojo y que se filmará en enero. Luego, la idea es que se estrenen mes a mes.

La materia oscura se llama este primer trabajo, que tiene un gran texto y un sólido elenco compuesto por Claudio Da Passano, Guido Botto Fiora y Mónica Raiola. Ellos le dan espesura a un material que pertenece al género fantástico y que resulta altamente inquietante. Con realización audiovisual de Rueguet Film, este material escrito por la dupla Veronese-Saba es una joya dramática que mezcla elementos del teatro porque sucede en un mismo espacio, ya que es una escena continuada y tanto su materialidad como temática son profundamente teatrales. Claro, le pidió al cine sus planos medios y primeros, su montaje y la posibilidad de mostrar un cielo estrellado.

La materia oscura es la historia de Alan y Magda (Da Passano y Raiola), un matrimonio citadino que desde hace unos años eligió cambiar de vida y radicarse en una casa a las orillas de un lago en el sur de la Argentina. Leo (Botto Fiora) es mochilero y buscando agua para su cantimplora encuentra esta casa como un refugio. Sin embargo, la llegada de este joven es mucho más que eso. Con él llega el pasado que tanto Alan como Magda intentan superar. Imposible. ¿Quién es este joven? ¿Qué viene a contarles? La presencia de Martín, el hijo muerto de ambos, se vuelve interrogante y presente. ¿Qué tienen el cielo y las estrellas para contarles? Alan es un aficionado a la astronomía y la frase misteriosa que llega desde el handy que utilizan para comunicarse, -"el cielo es el lugar donde los hombres decidieron poner a sus muertos"- se vuelve tan enigmática como los agujeros negros y la materia oscura. ¿Se puede enterrar el pasado?