Gran Hermano: cada participante recibió a un familiar, pero Romina terminó decepcionada con su visita

Luego de una gala de eliminación en la que Daniela quedó afuera del juego, muchos participantes de Gran Hermano estaban muy desanimados. Pero eso cambió durante la noche del lunes cuando la puerta de la casa se abrió seis veces para darle la bienvenida a un grupo de invitados muy especial.

A las 22.15 comenzó puntual la emisión, y el primer informe estuvo centrado en las consecuencias que dejó la partida de Daniela. Lucila consideraba que la fulminante de Julieta había repercutido en el destino de la eliminada, porque en sus propias palabras, aseguró que el público no apoya ese tipo de “juego agresivo”, mientras que Nacho también coincidía con esa mirada. Una vez finalizado ese compilado, dio comienzo el ingreso de los seis invitados al reality.

Valentina, la hermana de Marcos

De nuevo en el estudio, Santiago del Moro anunció que iban a entrar seis personas destinadas “a jugar, no a pasear”, y de ese modo presentó a Valentina, la hermana de Marcos. “Cuando ingreses a la casa, hablá del aquí y el ahora, entrá a jugar, respetá las reglas” le recordó el conductor a la joven de 26 años. “Está muy nerviosa. Él cree que ella está en Francia, porque vive allí” comentó Santiago del Moro, sobre la que será una de las sorpresas de la noche.

Florencia, la hermana gemela de Camila

Luego llegó el momento de Florencia. “Tiene 21 años, vive con su madre, es de Ituzaingó. Se llama Florencia y es la gemela de Camila”, con esas palabras presentaron a la joven. Y al momento de hablar, ella aseguró: “Voy a entrar a llevarle buena energía, y a estar con Camila. Estoy muy feliz de estar acá”.

Gladys, la mamá de La Tora

“Gladys es de Berazategui, y dudó mucho en entrar. ¡Ella es la madre de la Tora!”, así del Moro le dio la bienvenida a la mujer, y le advirtió: “Entrás a la casa a jugar con tu hija. Ojo con lo que le decís del afuera, la Tora ha sido muy viva en esta segunda entrada, así que jugá con ella así llega a la final”. Hechas las presentaciones de rigor, minutos después Gladys ingresó a la casa, y el reencuentro con su hija también estuvo marcado por la emotividad. Lucila caminó junto a su madre, y le presentó a todos los participantes.

Fabián, el sobrino de Romina

Fabián tiene 22 años y es el hijo mayor de la hermana de Romina. Antes de entrar aseguró: “Lo primero que voy a hacer es darle un abrazo enérgico, y demostrarle el amor de toda la familia”. El conductor explicó que al ser menores de edad, ninguna de las hijas de Romina podía ir a la casa. La jugadora miraba con muchas expectativas la puerta, a la espera de ver quién iba a entrar, y su emoción fue mayor cuando por allí ingresó su sobrino. Sin embargo, ella no pudo disimular su desilusión al no ver a sus hijas, por quienes les preguntó a Fabián apenas lo vio.

Camila, la hermana de Julieta

El quinto ingreso fue el de Camila, la hermana de Julieta, a quien Del Moro presentó así: “Ella es community manager, es creadora de contenidos en redes, vive con su novia, y va a ingresar en la casa más famosa”. “Estoy muy emocionada, muy ansiosa. Quiero darle un abrazo fuerte, y transmitirle el amor que todos tenemos afuera por ella”, aseguró la joven minutos antes del gran reencuentro.

Rodolfo, el padre de Nacho

De poncho y camisa blanca llegó Rodolfo, el papá de Nacho. Muy sonriente y decidido a apoyar a su hijo, Rodolfo habló con Del Moro, y prestó mucha atención en lo referido a las advertencias de no revelar nada del afuera. Cuando abrió las puertas del estudio, la emoción del participante fue mayor y tampoco pudo contener las lágrimas.

El mensaje de Del Moro

Con los seis familiares dentro de la casa, y los hermanitos alegres, el conductor quiso dirigirse a todos ellos, a través del habitual televisor. Y al momento de hablar, Del Moro les contó: “Todos están muy bien, quiero saludar a los nuevos integrantes de la casa. Van a estar unos días, ellos en cierta manera van a competir, tiene que ver con que indirectamente los van a apuntalar en este último trayecto, durante unos días. Entró gente que ustedes aman, no los expongan, una jugada en falso que Gran Hermano detecte y evalúe como infracción, los manda directamente a placa, y a los invitados los saca de la casa”.

Más adelante, Romina quiso preguntar si existía la posibilidad de ver a sus hijas, y Santiago le respondió: “Las menores de edad no pueden estar ahí, pero eventualmente pueden llegar a entrar más familiares, no lo sabemos. Ese momento quizá pueda llegar. Ahora disfruten de lo que hay, que es muchísimo”. Y por último, el conductor les comunicó una regla nueva: “Los familiares deben dormir en un cuarto separado de los jugadores”. De ese modo, y con mucha alegría llegó a su fin un lunes atípico en la famosa casa del reality.