Buscaban una vida más tranquila, compraron una casa en el bosque en San Francisco y ahora viven una pesadilla
Una pareja se mudó una antigua propiedad centenaria sin imaginar esperar que se terminaría infestada de ratas y escarabajos
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Una mujer y su pareja compraron la casa de sus sueños en medio de los bosques. Se trata de un acogedor hogar de alrededor de 100 años de antigüedad, ubicada en el Área de la Bahía de San Francisco, California. Sin embargo, lo que pareció ser una buena idea, se convirtió en una pesadilla al descubrir que la vivienda estaba plagada de roedores, insectos y escarabajos.
Laureise Livingston y su esposo adquirieron la propiedad hace dos años y, aunque esperaban tener problemas debido a los años del lugar, no pensaron que iban a tener que lidiar con dos plagas diferentes que lo infestaban y podrían destruirlo. Además de gastar miles de dólares en repararlo, tienen que convivir con las altas temperaturas para eliminar a los escarabajos barrenadores.
“Este es tu anuncio de servicio público de que si alguna vez has pensado en comprar una casa en una zona boscosa, simplemente no lo hagas”, comenzó la creadora de contenido en su cuenta de TikTok @laureise. De acuerdo a su relato, los insectos los están “comiendo vivos financieramente”, debido a los altos costos que implica combatirlos
De ratas noruegas a escarabajos perforadores: dos tratamientos que costaron miles de dólares
El primer problema surgió cuando la pareja escuchó arañazos debajo de las tablas de su piso. Después de investigar el origen de ese ruido, descubrieron que tenían ratas noruegas del “tamaño de una ardilla” masticando las tuberías HVAC, que alimentan la calefacción, ventilación y aire acondicionado de la casa. “Esto no sería un problema porque no molestaba, hasta que las ratas bajaron y comenzaron a masticar el amianto con el que está construida nuestra casa. Lo masticaban y usaban ese amianto para construir nidos debajo de nuestra casa”, recordó.
Para solucionar el problema de las ratas tuvieron que sacar todas las tuberías de HVAC, un proceso que costó 10.000 dólares. Además del dinero invertido, no pudieron utilizar la calefacción ni el aire acondiciones por seis meses, pero por lo menos se habían deshecho de las ratas. Pensaban que estaban a salvo, hasta que la empresa de control de plagas Terminix se contactó con ellos.
Según les informó, sus vecinos sufrían de termitas, por lo que les ofreció una inspección gratuita para prevenirlo a tiempo. Después de analizar todos los rincones del hogar, el personal de Terminix concluyó que no había termitas, pero estaban plagados de escarabajos barrenadores de madera. “Mi prometido y yo nunca escuchamos de ellos, entonces preguntamos qué son. Dicen que son tan malos como las termitas. Muerden la madera y ponen pequeñas larvas en ella. Luego, esos pequeños huevos eclosionan y continúan masticando la madera hasta que queda totalmente destrozada tu casa”, describió.
Para solucionar este segundo problema, tenían dos opciones: aceptar un tratamiento con calor para deshacerse de los escarabajos, que costaría US$4500 y que los obligaba a quitar todo lo que pudiera derretirse, o bien fumigar la casa, lo que implicaba irse del lugar por cuatro días e invertir US$7000 para el tratamiento. La pareja eligió la primera opción.
“Así que hoy tenemos nuestra casa tratada con calor. Hace un millón de grados adentro ahora, así que entraré y me sentaré en el calor. Pero al menos los escarabajos se han ido”, concluyó Livingston.
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