Qué dice el servicio sobre la tormenta de frío en Estados Unidos para hoy, jueves 29 de diciembre

Hasta el último balance oficial dado a conocer la tarde del miércoles, la tormenta Elliot cobró la vida de al menos 59 personas en Estados Unidos. Las temperaturas comenzarán a recuperar sus cifras promedio, pero parece que los estragos no cesarán. Las autoridades advirtieron que los efectos del frío extremo están lejos de terminar y que se prevé que en las próximas horas se presenten algunos fenómenos de riesgo para la población.

“Las temperaturas en gran parte del país experimentarán un drástico aumento en comparación con las de principios de semana... Temperaturas entre los 50° y 60° F (10° y 15° C) serán comunes para los estados del este”, explicó el reporte más actualizado del Centro de Predicción del Clima. El organismo anticipó que en regiones como los Grandes Lagos las mínimas podrían estar en niveles récord al ubicarse en los 30° F (-1° C): “Esto equivale a más de 20 grados por encima de la media en comparación con la climatología”.

A nivel nacional, la atención se centrará en el oeste del país, especialmente en California. Una nueva combinación de elementos meteorológicos propiciará nuevas condiciones para esta zona en los próximos días. Habrá lluvias intensas, inundaciones, nieve en zonas altas y fuertes rachas de vientos, como parte del fenómeno conocido como río atmosférico. Mientras tanto en el sur, el pronóstico señaló que podrían registrarse abundantes tormentas fuertes.

La presencia de nieve se mantendrá limitada a las zonas montañosas del país. El pronóstico dijo que en la región centro de las Altas Llanuras de Colorado se generará una capa de hasta cuatro pulgadas de nieve. “Un rápido paso de nevadas es posible al norte debido a un sistema de baja presión en desarrollo a medida que avanza desde Kansas al Medio Oeste durante el jueves”, se lee en el informe.

Más al este, se espera que haya chubascos y tormentas eléctricas en Texas y el Valle del Bajo Mississippi. Esto a causa de la presencia de humedad atmosférica en la avanzada de un próximo frente frío. Además, existe la posibilidad de que algunas de las tormentas se conviertan en severas y estén acompañadas de ráfagas de viento dañinas como principal riesgo.

Después de la nevada, el deshielo

En Nueva York, donde la tormenta azotó con más fuerza durante los días cercanos a la Navidad, las autoridades aún siguen en alerta por la probabilidad de inundaciones. La nueva advertencia es que la recuperación de las temperaturas representa riesgos en zonas bajas por el derretimiento de la densa capa de nieve que se formó en días previos.

Kathy Hochul, gobernadora de Nueva York, dijo a través de un comunicado que los trabajadores locales ya están listos para atender cualquier contingencia. “El personal de nuestras agencias estatales y los equipos locales de respuesta a emergencias se han coordinado durante toda la tormenta. Seguiremos haciendo todo lo posible para proteger a los habitantes del oeste de Nueva York y ayudar a nuestras comunidades a recuperarse”, sentenció.

Hochul ordenó el despliegue de más de 600 miembros de la Guardia Nacional para colocar bolsas de arena en los vecindarios y carreteras principales. La finalidad es evitar que el flujo de agua vuelva a paralizar la movilidad. Además, dijo que se repartirán generadores de electricidad en los más de 170.000 hogares que se quedaron sin servicio por la nevada.

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