Científicos destruyeron un nido de avispones "asesinos" donde vivían 200 reinas

Desde hace varios meses atrás, apicultores y expertos de la comunidad científica de Estados Unidos manifestaron su preocupación por la irrupción de una especie de avispones gigantes asiáticos llamados "avispones asesinos" y ahora se conoció que un grupo de especialistas destruyó un enorme nido.

Cuando los científicos de Washington desbarataron el primer nido de estos insectos y descubrieron alrededor de 500 especímenes vivos en diversas etapas de desarrollo, de los cuales 200 eran avispas reinas que podrían comenzar a reproducirse.

"Había casi 200 reinas que tenían el potencial de comenzar sus propios nidos", explicó Sven-Erik Spichiger, un entomólogo que lidera el equipo encargo de acabar con los avispones. Y advirtió: "Llegamos justo a tiempo".

Los funcionarios del Departamento de Agricultura del Estado de Washington (WSDA) publicaron recientemente un video que muestra a las avispas reinas capturadas. La mayoría de los especímenes aún estaban vivos cuando se abrió el nido, detalló WSDA.

Sin embargo, esto no significa que la amenaza de los insectos gigantes haya terminado. Los científicos creen que existen otros nidos y reconocieron que es imposible saber si alguna reina escapó antes de que se destruyera el primer nido.

Por eso, Spichiger describió que el objetivo del equipo es eliminar a los insectos antes de que se establezcan es un lugar y se propaguen, en tanto que el WSDA indicó que planea continuar atrapando avispones durante al menos tres años más para determinar si el área está libre de ellos.

El primer nido de avispas asesinas, encontrado en un árbol y destruido a finales de octubre en el condado de Whatcom a lo largo de la frontera con Canadá, tenía aproximadamente el tamaño de una pelota de básquet.

Estos grandes insectos son nativos de climas templados y tropicales en el este de Asia, donde matan a unas 50 personas al año. Los avispones tienen más del doble del tamaño de las abejas. Además, cuentan con un aguijón grande cargado con una neurotoxina, que es capaz de causar paros cardíacos y shocks anafilácticos.

En China, durante 2013, el municipio de Ankang fue asediado por estos insectos, que mataron a 41 personas en tres meses. Una de las víctimas fue un granjero de 40 años llamado Yu Yihong, que fue picado hasta la muerte después de pisar accidentalmente un nido de avispones.