Días
Hubo un tiempo en que el calendario que utilizo para saber (más o menos) en qué día vivo tenía, básicamente, días hábiles y feriados, y entre éstos, los patrióticos, los de la liturgia cristiana, algún inicio de estación, alguna que otra conmemoración.
Pero desde hace algún tiempo, mi calendario de trabajo tiene muchas más anotaciones, la mayoría de ellas manuscritas y a las apuradas. Ahí anoto los "días de las enfermedades". Cada vez con mayor frecuencia, cada enfermedad tiene su día en el calendario. El 28 de febrero, por ejemplo, es el Día Mundial de las Enfermedades Raras, muy poco frecuentes (un caso cada 2000 personas), que si bien afectan a una pequeña cantidad de gente representan, a la hora de sumarlas, 3 millones de pacientes en el país.
Pero antes, el 4 de febrero, es el Día Mundial contra el Cáncer, aunque octubre es siempre el mes de concientización sobre el cáncer de mama, y por eso en todo el mundo se iluminan de rosa los monumentos más importantes (aquí, la Casa de Gobierno pareció una discoteca durante varias jornadas) y muchos llevan cintas alusivas.
El 12 de marzo es el Día Mundial del Riñón. El 24 de marzo, el de la Tuberculosis. El 7 de abril, el Día de la Salud. El 11 de abril, el Día del Parkinson; el 29 de abril el Día de la Inmunología (y creo que algún otro "día" que ahora se me escapa); el primer martes de mayo, el Día del Asma; el 12 de mayo, el de la Fibromialgia; el 19 de mayo, el de las Hepatitis B y C, y el 27 de mayo, el Día de la Esclerosis Múltiple. Mayo cierra con la guerra al humo: es el Día Mundial sin Tabaco. El 26 de junio, el Día Mundial contra las Adicciones; el 12 de septiembre es el Día de la Salud Bucodental y, también, el Día de Acción contra la Migraña; el 15, el Día Mundial del Linfoma. El 26 de septiembre, del embarazo no planificado en adolescentes, y el 28, el Día Mundial del Corazón. El segundo sábado de octubre se conmemora el Día de los Cuidados Paliativos; el 10 de octubre, el de la Salud Mental, y el 19, el Día Mundial contra el Color. El 20 de octubre, el Día de la Osteoporosis; el 24, el de la Artritis Reumatoidea, y el 29, el Día del Ataque Cerebral. En noviembre, el 14 es el Día de la Diabetes y el 1° de diciembre, el Día Mundial de Lucha contra del Sida.
Para 2010 ya hay nuevos "días" anunciados. Por ejemplo, el de concientización sobre el ácido graso omega 3.
Por supuesto, sé que estoy olvidándome de muchas otras enfermedades conmemoradas, y aseguro que no es por minimizar su importancia, sólo que mi agenda está incompleta y no sé si a alguien se le habrá ocurrido ya recopilar prolijamente todas estas jornadas.
Pero, fuera de estos datos, ¿qué significa que más y más enfermedades tengan "su" día? ¿Se busca crear más conciencia, difundir lo que les pasa a quienes las sufren, que los gobiernos de turno le presten más atención? Quizás.
Sin embargo, es posible además que detrás de esta larga sucesión de "días" haya también otras motivaciones. ¿Quién no dijo o escuchó decir alguna vez que los clásicos días de la Madre, del Padre o del Niño no son otra cosa que operaciones comerciales para fomentar el consumo?
¿Podría ocurrir algo similar con las enfermedades?
A primera vista, parece que no. Sin embargo, algunos indicadores harían sospechar una asociación entre dedicar "días" a "enfermedades" y hacer, en algunos casos, una suerte de promoción casi marketinera de sus números (a cuántos afecta), qué síntomas produce y, a menudo, qué novedosos tratamientos existen para afrontarla, más de una vez medicamentos que, por nuevos y mejores que los disponibles (o eso es lo que nos dicen) cuestan más caros.
Más y más enfermedades tienen su día. Y está muy bien, finalmente, difundir y concientizar. Pero la principal endemia (es decir, un proceso patológico que se mantiene a lo largo de mucho tiempo) de nuestro país, que es el mal de Chagas, no tiene ninguna jornada asignada.
"El proyecto de declarar el 9 de noviembre Día Nacional del Chagas (por el aniversario de la muerte del doctor Salvador Mazza, que tanto trabajó en el tema) se originó en el Senado, que lo aprobó y mandó a Diputados, que lo corrigió y aprobó, y mandó de nuevo al Senado. Pero en el ínterin, en 2006, cambió de nombre el Ministerio de Salud. Y no hemos tenido más noticias hasta el día de hoy", se lamenta ante LNR el doctor Andrés Mariano Ruiz, director del Instituto Nacional de Parasitología Fatala Chabén.
El Chagas no tiene su "jornada". Ocurre a diario, los 365 días del año, casi siempre entre los más pobres y más vulnerables, más a menudo en el Norte, pero también aquí, cerca de la ciudad. Ocurre donde golpean las injusticias más duras. Para erradicar esta enfermedad no sería necesario ningún remedio ultramoderno o milagroso. O sí. Harían falta decisiones políticas. Y de las correctas, que tanto faltan.
La autora es subeditora de LNR