Tics modernos
La alegría brasileña
El que haya visitado alguna ciudad brasileña sabe que más allá de sus playas, su música y su alegría, lo mejor de Brasil se encuentra sobre la barra de sus bares. Allí se prepara la caipirinha, un trago que se consume rápido solo para poder disfrutar de la próxima ronda. La mejor anécdota que describe el poder de este cóctel tal vez sea la que va unida a la historia de la fábrica de coches Ford. Cuenta la leyenda que en los años 30, en la ciudad brasileña de Fordlandia, hogar de la industria del caucho para neumáticos, el mismísimo Henry Ford intentó prohibir la preparación de la caipirinha. Según él, sus empleados no rendían lo necesario por estar intoxicados por la bebida.
De más está decir que la ley seca nunca llegó a Brasil y la receta de su trago típico no hizo más que desperdigarse por el mundo. Se trata entonces de cortar media lima en ocho rodajas, colocar los pedazos en un vaso previamente helado, aplastar las limas y mezclarlas con el azúcar hasta que se disuelva. Luego se debe llenar el vaso con hielo molido y agregarle dos onzas de cachana. Para terminar hay que mezclar bien toda la preparación.
"Cualquiera que diga que no puede estar ebrio antes de media noche, es que no ha tratado lo suficiente". Y los bebedores de caipirinha suelen hacer grandes esfuerzos por quedar del lado de los que se esfuerzan por llegar a la bendita borrachera. Entonces, en estos tiempos no hay mejor plan que sentarse en el jardín del bar Millon (Paraná 1048), tomar una caipirinha y escuchar el disco Ellis & Tom , de Ellis Regina y Tom Jobim, la más adecuada banda sonora para el auténtico sabor brasileño.
Si no sabe, cante
- El karaoke en casa. El plan de despedir el año puertas adentro no tiene por qué sonar aburrido o morir con el último bocado de una clásica cena posbrindis. Ya sea entre amigos o en familia, en grupos íntimos o frente a grandes masas, los responsables de Akantar trasladan su cantobar ambulante hasta donde se los contrate para poner a sonar tantas horas de bases musicales y letras de canciones cargadas en una compu como los anfitriones estén dispuestos a recibir (tienen registrados más de mil temas). El show es un delivery que se puede pedir por el 4957-0836. Se paga por hora y cuesta $ 120.
Obra esperanzadora
- Un lugar de expresión. Alejandro Gilligan, con su obra Esperanza , resultó el ganador del concurso Manu Chao, ralizado por el canal de videos MuchMusic y en el que el jurado, una vez más, fue el público. Durante un mes, la audiencia de MuchMusic envió sus dibujos, fotos, poesías, pinturas, esculturas y todo tipo de creaciones que representaran "la esperanza" y, finalmente, a través de Internet, se escogió al ganador. ¿El premio? Un viaje por una mítica ruta de América latina (El camino del Inca y Machu Picchu, La ruta Maya o El Amazonas), recorrida previamente por el francés Manu Chao.