De los lectores: cartas & e-mails
Las otras curvas
El señor Presidente y sus asesores en salud ponen el foco, a través de mensajes retóricos y disciplinadores, en la dicotomía cuarentena o muerte. Mientras tanto, sin saberlo, muchos pacientes ya están caminando hacia ese lamentable final. El miedo inculcado al contagio y la profunda crisis económica que comenzamos a transitar impactan directamente sobre dos poblaciones en riesgo. Los pacientes que cursan enfermedades crónicas y los que necesitan estudios de diagnóstico para la prevención requieren la prescripción y el consumo de medicamentos en forma permanente. El no cumplimiento del tratamiento provoca graves complicaciones, que en muchos casos desembocarán en resultados irreversibles. La prevención es el mejor remedio para muchas patologías, por ejemplo, el cáncer de mama o de colon, que requieren pruebas diagnósticas inmediatas para su tratamiento. Debido a la reclusión, el miedo y la falta de medios económicos, muchos pacientes dejaron de ir a su consulta médica, no toman su medicación, no realizan sus chequeos regulares ni los análisis necesarios. Las consecuencias se verán en la pospandemia, en una curva de decesos mucho más significativa que la causada por el Covid-19.
Alberto Guillermo Szulga
agszulga@hotmail.com
Falta de cálculo
Los gobiernos de la Nación, la ciudad y la provincia de Buenos Aires están por insistir en prohibir la circulación y, por ende, el comercio y otras actividades que realizamos los ciudadanos, con el argumento de que se espera un recrudecimiento de la pandemia y se corre el riesgo de que se sature la disponibilidad de camas de terapia intensiva y así evitar contagios y pérdidas de vidas humanas.
Ahora bien: hace casi cuatro meses que comenzó este flagelo y recién ahora los gobiernos advierten algo que era previsible. ¿Por qué no aumentaron el número de camas y contrataron y capacitaron a médicos y enfermeros en tiempo oportuno? ¿No vieron lo que sucedió en otras naciones? ¿Calcularon el daño económico que implica la casi paralización de la actividad en todas sus facetas?
Guillermo Lascano Quintana
DNI 4.415.520
Focos de contagio
El gobernador Kicillof ha insistido cada vez más que uno de los focos de contagio más frecuente del coronavirus es durante el viaje de los usuarios en el transporte público, lo cual es muy posible. Pero para ratificar lo afirmado sería de gran utilidad difundir cuantos choferes de esos medios de transporte se han contagiado durante su trabajo. Es verdad que los conductores están parcialmente protegidos, pero para ser claros y precisos en el análisis debería conocerse la cifra total, para recién entonces adoptar las medidas pertinentes.
Pedro R. Cossio
pinaco3@yahoo.com.ar
Suiza y la RBU
En su carta de ayer, los señores Jorge García Mantel y Guillermo MacLoughlin se refieren a los dichos del doctor Eduardo Duhalde y la RBU. Sobre el particular, recuerdo que hace un par de años, y a pedido de un partido político, el gobierno de Suiza llamó a votar una propuesta similar. El programa describía que cada suizo –trabajara o no, tuviera fortuna o no– recibiría unos 2400 francos suizos (unos US$2500) mensuales. Como los suizos pensaron que de algún lado debería salir esa cantidad de dinero (impuestos), el voto negativo fue de más del 70%.
A buen entendedor, pocas palabras.
George W. Handley
gwhandley@bluewin.ch
Enseñanza
Vivo desde hace 27 años en forma ininterrumpida en un distrito de la zona sur del conurbano. Puedo decir que aquí la curva crece simplemente porque no hay controles de ninguna naturaleza, salvo en los lugares donde la gente puede ser vista (léase autopista Buenos Aires-La Plata y ramal Gutiérrez). El lunes pasado, en una calle con cinco comercios, cuatro estaban abiertos (aun los rubros no autorizados), y todo el vecindario se desplazaba en la más absoluta normalidad. ¿Será que somos hijos del rigor? Una vez más, pido respeto por el prójimo, por los próximos, y adecuarnos a medidas sanitarias… ¿o es que otra vez detectamos que la gran ausente es la educación? Ya no caben dudas: en cualquier plan de gobierno, esa debe ser la prioridad. Y cumplir con nuestra Constitución, de donde surgen todos nuestros derechos y obligaciones. Es hora de cumplir, tanto gobernantes como gobernados… la pandemia nos lo exige… y nos lo enseña.
Roberto O. López Fagundez
DNI 8.472.826
Gastos de sepelio
Tras el fallecimiento de mi padre, Osdipp, Obra Social del Personal de Dirección de la Industria Privada del Petróleo, a la que pertenecía, nos informó que no cubriría los gastos de sepelio, al aducir que así lo establece el Plan 300, que él tenía. Mi padre aportó a esta obra social por más de 30 años. El Plan 300 estipula: "Gastos de sepelio por fallecimiento del titular, subsidio de $14.000, que será percibido solo por un integrante del grupo familiar primario afiliado a Osdipp al momento del fallecimiento". Como ya nadie en mi familia está cubierto por esa obra social, mi padre no recibió ni un pésame por parte de Osdipp. Solo explicaciones para no cubrir parte de los gastos de sepelio por esa cláusula, que considero abusiva y discriminatoria para con las personas mayores solas. Aunque eso no sorprendió a nuestra familia. Mi padre había sido declarado con discapacidad hace mucho, y pasó sus últimos cuatro años y medio internado. Por ley, las obras sociales deben cubrir el 100% de los gastos de una persona discapacitada, pero en su caso la obra social no lo hizo, pese a que la Superintendencia de Servicios de Salud de la Nación la intimó hace ya más de dos años a cubrir el 100% de los gastos. Por tal motivo, quisiera alertar sobre esta "letra chica" de quienes deben supuestamente brindar servicios sociales y luego abandonan a un afiliado y a sus familiares en un momento tan doloroso como una muerte.
Guillermo P. Pensado
DNI 20.702.358
En la Red
Coronavirus en la Argentina: endurecimiento con principio y fin, la receta contra el mal humor social
"Mentira, cuando se esté llegando a la fecha se van a volver a disparar los casos y la van a volver a extender"-Walter Kobold
"No se puede jugar más con la salud mental de la gente"-Carla Martínez
Los textos destinados a esta sección no deben exceder las 15 líneas o los 1100 caracteres. Debe constar el nombre del remitente, firma, domicilio, teléfono y número de documento. Por razones de espacio y de estilo, LA NACION podrá seleccionar el material y editarlo. Los mensajes deben enviarse a: cartas@lanacion.com.ar o a la dirección: Av. Del Libertador 101, Vicente López (B1638BEA)