Créditos para el liderazgo femenino
En unos días, más de 1000 instituciones financieras se reunirán en Buenos Aires para celebrar el 50° aniversario de la asamblea anual de la Federación Latinoamericana de Bancos. Vienen de más de 50 países para discutir temas de importancia para el sector bancario y, sobre todo, para hacer negocios. Esperamos que estos banqueros y banqueras aprovechen las reuniones para abordar una puesta de futuro para la banca: el mercado de las pymes lideradas por mujeres.
Estamos hablando de una oportunidad de mercado de hasta 800.000 millones de dólares anuales globales. En América Latina y el Caribe, la región con mayor porcentaje de emprendimiento femenino del mundo, esto significa más de 86.000 millones de dólares anuales. Se trata de un colectivo que, aunque invierte un 50% menos de capital que sus pares masculinos, registra un 20% más de ingresos. Además, las pymes lideradas por mujeres tienen una probabilidad de impago un 54% menor que aquellas dirigidas por hombres.
Estas cifras han captado la atención de varios bancos a nivel global, que han apreciado no sólo el comportamiento y rentabilidad de estas empresas dirigidas por mujeres sino también la oportunidad de mercado que representan. Muestra de este interés es la Alianza Global de Bancos para la Mujer, que cuenta ya con más de más de 46 miembros trabajando en 135 países.
Un ejemplo de éxito es el banco turco TEB, que decidió apostar por este mercado tras percatarse de que su cartera de pymes tenía un mejor rendimiento que su cartera corporativa: 80 puntos básicos mejores. Además, la entidad se dio cuenta de que pese a que el 40% de las pymes turcas son propiedad de mujeres, sólo un 15% de ellas estaba recibiendo financiamiento bancario y desde entonces ha tenido éxito cerrando esta brecha. Además en el banco australiano Westpac ya hace más de 15 años que viene creciendo su cartera en este mercado.
En América latina y el Caribe, las estadísticas nos dicen que un 70% de este tipo de pyme no tienen atendidas sus necesidades de crédito, lo que para los bancos se traduce en un número significativo de potenciales clientes. En la región existen ya algunos bancos pioneros. Banco Nacional de Costa Rica, por ejemplo, lanzó en 2010 el programa Banca Mujer que diseña y ofrece productos financieros para este segmento. En Brasil, el Banco Itaú, aumentó su cartera de pymes dirigidas por mujeres de un 22% a un 34% de 2013 a 2015.
No siempre es fácil. A veces este mercado presenta algunos obstáculos para las instituciones financieras como la falta de historiales crediticios o el diseño de productos apropiados. Desde la Corporación Interamericana de Inversiones (CII), el brazo para el sector privado del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), buscamos superar estos retos al combinar asistencia técnica y financiamiento, y nos gustaría poder hacerlo en la Argentina.
Las instituciones financieras argentinas, por su capacidad de alcance y su conocimiento local, pueden jugar un rol catalítico fomentando la creación del empleo, el desarrollo profesional de la mujer y el de la sociedad. Cuando las mujeres ganan, las familias, comunidades y generaciones venideras ganan también.
En la Argentina más del 60% de las pymes dirigidas por mujeres no tiene acceso a financiamiento. Dicha brecha equivale al 2% del PIB, la mayor de los países del G20 junto a Brasil y Turquía. Si el país lograra cerrar esta brecha, podría impulsar el crecimiento del ingreso per cápita en casi 130 puntos básicos. Los bancos, a su vez, podrían descubrir un mercado solvente y rentable.
Si tantos bancos están ya financiando a pymes lideradas por mujeres, ¿por qué la Argentina no está haciéndolo?
Directora general de negocios ?de la Corporación Interamericana ?de Inversiones
Gema Sacristán