La nueva derecha y la República
Casi en forma atropellada se suceden en el mundo noticias que generan desconcierto y, en no pocos casos, también temor. Cambios profundos hacen emerger líderes políticos desconcertantes en países de relieve por su influencia regional y global. Sangrientos conflictos se prolongan, con la participación directa o embozada de grandes potencias. Históricos procesos regionales de integración muestran señales de haber llegado a un punto de regresión. Iniciativas secesionistas convulsionan tradicionales Estados europeos. Movimientos extremistas subsisten agazapados en espera de una oportunidad. Quizá el signo más duro del advenimiento de un nuevo tiempo político fue la controvertida llegada a la presidencia de los EE.UU. de Donald Trump. Pero también en varios países se manifestó el debilitamiento de los partidos que podrían considerase de centro o moderados y el correlativo fortalecimiento o triunfo de partidos radicales más bien reaccionarios, en algunos casos, también populistas. Cabe preguntarse por la forma en que funciona la República y las posibilidades de la agenda política de interpretar los reclamos y necesidades de la sociedad de hoy. Como en tantos otros momentos de la historia, es oportuno apelar a los moderados para que puedan hacer oír su voz.
Revista Criterio