Juntos por el Cambio: un mensaje de optimismo y gestos de alivio por los números de Vidal

En el cierre de las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO), los dirigentes de Pro y funcionarios de la Ciudad de Buenos Aires que llegan al búnker de Juntos por el Cambio (JxC), en Costa Salguero, están pendientes de los primeros de la interna porteña. “Estamos bien”, repitieron con entusiasmo las fuentes porteñas, que siguieron todo el día los niveles de participación.

El jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y el expresidente Mauricio Macri ya llegaron a Costa Salguero y se refugiaron en el VIP. También llegó la titular de Pro, Patricia Bullrich, quien se adelantó a los resultados y afirmó: “Juntos por el Cambio hoy va a poder decir que ganó en todo el país”.

Al llegar al evento, Bullrich aseguró que la coalición está “ganando en provincias en las que no tenía pensado ganar” y que las listas conjuntas proyectan “una victoria nacional”. Además, respecto del caudal de electores que participaron en las PASO, indicó: “Nosotros fuimos muy generosos al plantear que se postergasen las elecciones un mes, y eso da una participación más baja, pero no tan baja como se esperaba”.

Alrededor de las 21.30, se unieron al búnker Ricardo López Murphy (Republicanos Unidos) y Adolfo Rubinstein (Adelante Ciudad), los candidatos que le disputaron la interna porteña a María Eugenia Vidal. Fueron recibidos con abrazos y aplausos, junto a otros integrantes de las listas que encabezan.

Pasadas las 20, se respiraba optimismo en el salón reservado para ministros, candidatos y legisladores del espacio por los datos de la elección porteña y del desempeño de la fuerza en el interior del país. “Están todos contentos”, comentó un dirigente de Pro mientras caminaban por el VIP. Allí, Larreta, Macri y Bullrich esperaban la llegada de María Eugenia Vidal. Todos ellos se subirán al escenario que se montó afuera del Pabellón 6. La gran ausente sería Elisa Carrió, la líder de la CC, quien se fue a su chacra de Exaltación de la Cruz tras emitir su voto. “Nos dijo que no va”, apuntaron desde su entorno.

En la coalición oficialista confían en que la boleta de Vidal, la candidata apalancada por Rodríguez Larreta, supere la línea de los 30 puntos. Ese número es clave, ya que la ubicaría por encima de Leandro Santoro, el postulante del kirchnerismo porteño. “Ella no tiene que sacar menos de treinta y el frente llegar al 45”, comentan cerca de la exgobernadora.

En el búnker porteño de JxC creció el optimismo a medida que llegaron los primeros datos de las mesas testigos. “María Eugenia pasaría los 32. Arrasó en la comuna 13 (Núñez, Belgrano y Colegiales)″, comentó un ministro porteño.

En Pro dan por descontado que Ricardo López Murphy (Republicanos Unidos), rival de Vidal en la interna oficialista, superará el piso del 15% de los votos fijado por la alianza y se integrará a la nómina de la exgobernadora. “El objetivo ahora es que los votos de Ricardo queden adentro”, afirman. En el vidalismo causó cierta sorpresa el desempeño del radical díscolo Adolfo Rubinstein (Adelante Ciudad).

Por ahora, las cifras de boca de urna que manejan en Pro ubican a Leandro Santoro (Frente de Todos) en torno al 28% de los votos, mientras que Javier Milei (La Libertad Avanza) se ubicaría en tercer lugar con el 10% de los sufragios. En tanto, la alianza JxC obtendría el 49%.

Fernando Straface, jefe de campaña de Vidal, fue el primer orador de la jornada. El funcionario porteño reconoció que el nivel de concurrencia a las urnas en las primarias de hoy estuvo por debajo del promedio histórico de la Capital. “Todas las fuerzas políticas tenemos un desafío de cara a las elecciones generales”, sostuvo Straface, quien asistió a la conferencia de prensa acompañado por el primer candidato a legislador porteño, Emmanuel Ferrario. En el Ejecutivo porteño sospechan que el contexto atípico por la pandemia pudo desalentar la participación. Cerca de Vidal, en tanto, celebraban que haya habido buenas condiciones climáticas durante toda la jornada. “Nos tocó un lindo día. No es un dato menor”, expresó un alfil de la postulante.

Desde temprano, Straface, uno de los colaboradores más estrechos de Larreta, monitoreaba los últimos datos de la elección en el VIP para funcionarios y postulantes. En la Ciudad celebran que no haya habido inconvenientes en el distrito durante toda la jornada, más allá de las demoras y las largas colas por los protocolos.

Expectativa

López Murphy esperó los resultados en sus oficinas de la calle Suipacha al 200, en el microcentro, y Rubinstein a pocas cuadras de ahí, en el Hotel Bristol, frente al Obelisco. Eran pocas las personas reunidas en respaldo del disidente del radicalismo porteño. “Es algo íntimo. El aforo es reducido por motivos sanitarios”, dijeron a LA NACION fuentes cercanas al exsecretario de Salud de la Nación. “El ambiente es muy bueno, en términos anímicos. Estamos todos muy contentos porque con casi nada, y con viento en contra, hicimos una gran campaña”, aseguraron, antes de partir a Costa Salguero.

En el Hotel Bristol estuvieron presentes, además de Rubinstein, la docente Mónica Marquina -segunda en la lista de candidatos diputados-, Andrés Borthagaray -quien encabeza la lista para la Legislatura porteña- y Ricardo Gil Lavedra -apoderado de la lista-, entre otros.

López Murphy también tenía buenas expectativas. En su entorno estimaban que fuera la sorpresa de la interna porteña.

En el larretismo habían optimismo por los números que llegaban desde La Plata: Diego Santilli, el exvicejefe porteño, se impondría con comodidad sobre Facundo Manes, la carta de la UCR, en la interna bonaerense de Juntos.

Larreta enfrenta hoy una prueba de fuego para consolidar su proyecto presidencial. El jefe porteño, quien suele destacar que JxC logró sellar la unidad en 21 de los 24 distritos del país debido a que utilizó las PASO, tiene su principal foco de atención en su experimento electoral en el AMBA. Si como se prevé, Vidal gana en la Capital –y la alianza supera los 40 puntos- y Santilli doblega a Manes en Buenos Aires, el alcalde porteño podrá jactarse de que su propuesta iba en el “camino correcto”. De todos modos, en la cúpula porteña repiten que el resultado de las PASO no altera su tablero: “La película termina en noviembre”, remarcan.

Tras votar en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires (UBA), ubicada en el barrio de Recoleta, Larreta almorzó con sus hijas, su madre y sus hermanos. A la tarde tenía previsto descansar en su casa antes de dirigirse al búnker en Costa Salguero.

Con la colaboración de Inés Beato Vassolo

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