Arroyo asumiría con $5000 millones para políticas alimentarias

En tiempos de transición, la Casa Rosada decidió reservar unos $5000 millones pertenecientes a la partida presupuestaria de políticas alimentarias para que queden a disposición del gobierno entrante. De los $27.000 millones que alcanzaron las partidas de los programas alimentarios como resultado del último aumento, gracias a la ley de emergencia alimentaria, solo se gastarán $22.000 millones como máximo. La decisión fue confirmada por el Ministerio de Salud y Desarrollo Social que encabeza Carolina Stanley.

Según el sitio web Presupuesto Abierto, la semana pasada se alcanzaron los $17.150,2 millones devengados, sobre un presupuesto de $27.315,8 millones. En términos porcentuales, solo se ejecutó el 62,8% del presupuesto correspondiente al área. Desde el Ministerio indicaron que hasta el 10 de diciembre emplearán unos $21.203,6 millones, lo cual implicaría el 78% de la partida presupuestaria vigente.

"Hay una parte que no se va a terminar de ejecutar. Queremos ser racionales y dejarle un margen al gobierno que viene, para que puedan manejarse en los últimos días de diciembre y en los primeros de enero", explicaron a este diario fuentes del Ministerio de Salud y Desarrollo Social. El argumento central para defender esta subejecución apunta a evitar que el gobierno entrante se quede "sin caja" ante la falta de aprobación del presupuesto para el año próximo. El proyecto aún no fue tratado en el Congreso. De hecho, todavía reina la incertidumbre acerca de una posible fecha en la que podría comenzar a discutirse.

Quien aparece en todos los cálculos como el futuro ministro de Desarrollo Social de Alberto Fernández, Daniel Arroyo, ratificó que la administración actual está preservando una parte del presupuesto para el próximo gobierno. "Todo indica que es así. El que sigue el presupuesto sabe que es así, por la evolución presupuestaria", afirmó, aunque aclaró que no mantuvo un diálogo al respecto con Stanley ni con otros referentes de la cartera que conduce.

De todas maneras, más allá de los $5000 millones que quedarían a disposición del próximo gobierno para ejecutar, aún faltan cerca de $4000 millones para llegar al total de $27.000 millones presupuestados. Aunque en el Gobierno prevén utilizar esos $4000 millones antes del 10 de diciembre, el dinero aún no fue devengado. Parte del dinero pendiente de devengar pertenece a las partidas que deben ser transferidas a las provincias.

El Programa de Complemento Alimentario es donde más lejos se está de alcanzar el gasto previsto. Se trata de una iniciativa compartida con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), que asiste a comedores barriales de o pertenecientes a distintas instituciones religiosas, como Cáritas o la Iglesia Católica.

Para las tarjetas alimentarias, en cambio, ya se cubrió casi todo el gasto presupuestado. Este programa se dirige directamente a las familias y, aunque busca evitar la intermediación de "punteros" en el territorio, los fondos son girados a las provincias.

Los programas de políticas alimentarias alcanzaron la cifra de $27.000 millones por disposición de la ley de emergencia alimentaria, sancionada por el Congreso el pasado 18 de septiembre. El aumento presupuestario de $9000 millones se volvió efectivo el 30 del mismo mes, al ser publicado en el Boletín Oficial. La ley, aprobada tras una fuerte presión de los movimientos sociales, establecía que las partidas destinadas a programas alimentarios debían aumentar un 50%.

Debe y haber del oficialismo

$27.000 millones

• Es el presupuesto anual destinado a los programas alimentarios, luego del aumento de $9000 millones que resultó de la ley de emergencia alimentaria. El macrismo prevé dejar el poder habiendo devengado $22.000 millones de ese presupuesto total.

$4000 millones

• Es lo que prevé utilizar el Gobierno en alimentos antes del 10 de diciembre. Parte de esos fondos no ejecutados pertenece a las provincias.