Axel Kicillof limitó el impuestazo y logró apoyo opositor a dos leyes clave para su gestión
El tope del impuesto bajará de 300 a 200% y el piso, de 140 a 130%; el gobernador consiguió que la Legislatura sancione la ley impositiva y un endeudamiento por US$1800 millones
LA NACION
LA PLATA.– La Legislatura de la provincia de Buenos Aires sancionó poco después de la medianoche dos proyectos de ley vitales para la gestión del gobernador Axel Kicillof: la ley impositiva 2024, que prevé fuertes aumentos, y un pedido para tomar deuda por el equivalente a 1800 millones de dólares. Las sesiones en ambas cámaras comenzaron pasadas las 22, en simultáneo. El Senado convalidó ambas normas al filo de la medianoche y Diputados completó el trámite media hora después.
Ya al caer la noche se había logrado un acuerdo para avanzar en la sanción de las normas con fuertes modificaciones a los proyectos enviado por el Poder Ejecutivo. La principal es un tope de 200 por ciento en el aumento del impuesto inmobiliario para los bienes patrimoniales de mayor valor y un piso del 130 por ciento para el resto. La propuesta original incluía alzas de hasta 300 por ciento y partía desde un 140 por ciento para las partidas de menor valor fiscal.
La Cámara de Diputados aprobó tanto la ley impositiva como el endeudamiento con los votos del oficialismo y parte de los bloques que antes componían Juntos por el Cambio: la UCR, Pro y la Coalición Cívica. Los libertarios, la izquierda y los radicales díscolos que formaron un bloque junto al GEN rechazaron las iniciativas.
Para destrabar el apoyo fue clave la creación de un Fondo para Intendentes por 116.000 millones de pesos. Además, la oposición consiguió quitar del temario los proyectos para crear la Empresa Bonaerense de Emergencias de Salud y el Centro de Industria Farmacéutica Bonaerense.
La negociación en la Cámara de Senadores estuvo a cargo de la presidenta del bloque de Unión por la Patria, Teresa García, que ordenó la votación en la cámara de origen con sucesivas negociaciones a lo largo de toda la jornada para dotar a Kicillof de dos instrumentos claves para su administración el año que comienza.
Unión por la Patria tuvo que ceder varios puntos en busca de consenso con un cuerpo dividido en siete bloques, solo en el Senado, para intentar aprobar los dos proyectos que en principio generaron resistencia entre diversos sectores de la oposición que se hicieron eco del malestar entre los contribuyentes.
Las alzas más importantes se registrarán en las alícuotas del impuesto inmobiliario rural y urbano, donde la suba –para un 8 por ciento de las partidas– llegará al 200 por ciento interanual. El 90 por ciento de los contribuyentes recibirá una actualización menor, en torno al 130 por ciento, tras una ardua negociación entre el oficialismo y la oposición parlamentaria.
“Nosotros hicimos hincapié en que no íbamos a acompañar un alza del 300 por ciento. Se terminó de consensuar un tope de 200 por ciento, con escalas desde 130 tanto para inmobiliario como para patentes”, informó Sergio Vargas, de La Libertad Avanza.
Los tres senadores de ese bloque dijeron que dieron en la Legislatura el quorum que esperan en el Congreso de la Nación para el proyecto enviado por el presidente Javier Milei. Este bloque se opuso a que las empresas prestatarias de servicios como Ceamse, AySA, Buenos Aires Gas Sociedad Anónima y Obras Sanitarias queden exentas de Ingresos Brutos.
La Ley Impositiva 2024 traerá una serie de novedades, no sólo en la suba de las alícuotas en los bienes patrimoniales de mayor valuación. También incluirá la posibilidad de actualizar impuestos varias veces en el año.
Las dos propuestas del Poder Ejecutivo fueron cuestionadas por la oposición, que exigió modificaciones. “Es difícil por las diferencias que tenemos en los aumentos patrimoniales”, dijo el senador Marcelo Daletto (Pro) a LA NACION.
Los presidentes de los bloques opositores se reunieron este jueves con el ministro de Economía, Pablo López, para destrabar la ley.
Desde el poder Ejecutivo se aseguró que Ley Impositiva 2024 “se redactó sobre la base del concepto de mayor progresividad a la estructura tributaria, haciendo hincapié en la solidaridad de los sectores con mayor capacidad contributiva, y atendiendo especialmente la realidad de las pymes, que son el principal factor de generación de empleo”.
Según informaron fuentes oficiales, en el caso del impuesto inmobiliario se establecieron topes progresivos de crecimiento del gravamen respecto al año anterior, los cuales son ascendentes a mayor patrimonio.
En tanto, el pedido para tomar deuda por 1800 millones de dólares es igual a los vencimientos que tiene la provincia en 2024. Pero sólo 720 millones de esta deuda que vence el año que viene está nominada en billetes norteamericanos.
Para aprobar el endeudamiento que incluye el pago de vencimientos de la deuda contraída por gestiones anteriores a la de Kicillof, se acordó el seguimiento de una comisión bicameral para el uso y la administración de esos fondos.
Por último, Pro y la UCR acordaron con el gobierno bonaerense el depósito para este jueves de la mitad de la deuda que la Provincia mantiene con las intendencias, lo que había sido, en el inicio de esta semana, la prenda de cambio para prestar a votación las manos opositoras.
En medio de las negociaciones con la oposición, Kicillof no se privó de criticar ayer al Presidente: “Siempre es más fácil firmar un decretazo y mandar una súper ley que dedicarse a laburar. Esos que dicen ser eficientes son bien vagos. Los decretos se los escriben otros”, fustigó, en alusión al megadecreto del libertario.
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