El Gobierno dice que el reclamo de la CGT por la inflación es contra los empresarios

El gobierno de Alberto Fernández decidió “no interferir” para intentar dar de baja el reclamo que la CGT llevará mañana a las calles porteñas, con el apoyo de movimientos sociales cercanos a la Casa Rosada. Desde Balcarce 50 consideran que la demanda sindical, centrada en la inflación que erosiona los salarios, es “entendible”, aunque también retrucan que las paritarias cerradas recientemente en distintos gremios “le ganan por poquito, uno o dos puntos” al aumento de los precios.

Fuentes oficiales apuntan a la reunión del Consejo del Salario, en la que trabaja el ministro del área, Claudio Moroni, y en la que el lunes próximo sindicalistas y empresarios tienen previsto definir por consenso el nuevo aumento oficial para el sueldo mínimo, que es hoy de 47.850 pesos. También sugieren que los destinatarios de los reclamos, en este caso, no son para el Gobierno, sino para las empresas que “remarcan” y de ese modo colaboran para que el índice inflacionario llegara al pico histórico de 7,4 por ciento el mes pasado.

“Nunca intervenimos y tampoco lo haremos ahora. Todos tienen libertad de manifestarse”, se atajaron desde distintos despachos oficiales en torno a la manifestación, denominada “Primero la Patria” y a desarrollarse por la tarde en la Plaza de la República. Remarcan que la manifestación “no es contra el Gobierno, ni contra (Sergio) Massa”, y hacen suyas las palabras de distintos líderes sindicales que apuntan a los empresarios más que a los funcionarios. “Nosotros nos vamos a manifestar en contra de los formadores de precios y de los que quieren desestabilizar al Gobierno con una devaluación escandalosa”, dijo hoy Abel Furlán, secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), quien también anticipó su acuerdo con acordar “una suma fija que no esté atada a ninguna paritaria. Que sea para recuperar el poder adquisitivo”.

¿Hay una reacción de la CGT por el protagonismo que tomaron las protestas de la izquierda trotskista, que la semana pasada incluyeron un acampe frente al Ministerio de Economía? “Son protestas distintas, la izquierda pide más planes, la CGT quiere aumentos de salarios”, puntualizan desde un despacho oficial.

Y destacan que también movimientos sociales afines al Gobierno, como el Movimiento Evita, participarán de la movilización de mañana porque, como afirmaron desde ese sector a LA NACION, “comparten las consignas”, centradas en culpar a las empresas por los aumentos de precios en productos básicos. “Los movimientos populares nos movilizamos contra quienes especulan y aumentan los precios”, afirman desde el movimiento encabezado por Emilio Pérsico a través de las redes sociales. Mientras la CTA de Hugo Yasky también se sumará a la marcha frente al Obelisco, la izquierda dura insistirá en su reclamo, pero irá (otra vez) a la Plaza de Mayo, bien cerca de la Casa Rosada y el Ministerio de Economía.

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