Irán pidió dialogar con la Argentina en la ONU
En forma sorpresiva y sin demasiados preámbulos, el gobierno de Irán solicitó ayer reabrir el diálogo con la Argentina y eligió como marco institucional para ello la Asamblea Anual de las Naciones Unidas, que se desarrollará la semana próxima en Nueva York, donde viajará la presidenta Cristina Kirchner.
Por medio de una nota oficial remitida anoche a la misión argentina ante las Naciones Unidas, la República Islámica de Irán solicitó una audiencia bilateral del canciller iraní, Ali Akbar Salehi, con su par argentino Héctor Timerman en la asamblea de la ONU.
La Cancillería argentina sólo se limitó a brindar un comunicado de prensa con ese pedido y no dio más detalles de los pormenores del reclamo de diálogo. El vínculo entre la Argentina e Irán está casi roto ya que el Gobierno reclama desde hace más de seis años a Teherán que colabore con la investigación judicial por el atentado a la AMIA. De hecho, Irán no tiene embajador en la Argentina desde que se enfriaron los relaciones diplomáticas.
Anoche, Alí Pakdaman, el agregado de negocios de Irán en Buenos Aires, expresó a LA NACION que "el pedido de diálogo de Irán responde a un reclamo que hizo la presidenta Cristina Kirchner hace un año en la ONU y se dará en el marco de mayor transparencia y normalidad, como puede ser una asamblea anual de Naciones Unidas".
Pakdaman se refería así al discurso que brindó el año pasado Cristina Kirchner en la ONU, donde exigió a Irán que colabore con la justicia argentina por el esclarecimiento del atentado a la AMIA y le pidió a ese país que se siente a dialogar con Buenos Aires.
"No hay nada de extraño o sospechoso en este pedido de reunión de cancilleres. Simplemente es una respuesta de mi gobierno a un pedido de la Argentina", añadió Pakdaman. El diplomático iraní resaltó además que su país está dispuesto a colaborar con la justicia argentina para "arribar a la verdad". Detalló además que no hubo un cambio de postura de su país o una negociación secreta entablada con el gobierno argentino.
En otras asambleas de la ONU, la Argentina reclamó justicia por el atentado perpetuado en 1994 contra una mutual judía en Buenos Aires, donde murieron 85 personas. Por este atentado, la Argentina reclama las detenciones de ocho iraníes y un libanés. En 2006, la justicia argentina libró una orden de captura internacional contra el ministro iraní de Defensa, Ahmad Vahidi; el ex ministro iraní de Información Alí Fallahijan, el ex asesor gubernamental Mohsen Rezai, el ex agregado de la embajada de Irán en Buenos Aires Moshen Rabbani, el ex funcionario diplomático Ahmad Reza Ashgari y el libanés Imad Fayez Mughniyah.
También son requeridos por la justicia argentina el viceministro de Relaciones Exteriores para Asuntos Africanos de Irán, Hadi Soleimanpour; el ex presidente iraní Alí Akbar Rafsanjani, y el ex ministro iraní de Relaciones Exteriores Alí Akbar Velayati.
Hasta ahora, Teherán nunca aceptó extraditar a la Argentina a estos acusados para ser juzgados. Desde entonces, las relaciones diplomáticas están casi rotas. "El vínculo se resume en una relación prácticamente unilateral donde la Argentina es el mayor beneficiado", comentó ayer Pakdaman en alusión a que la Argentina le vende a Irán 1700 millones de dólares por año en commodities y sólo compra US$ 20 millones al año. Actualmente no existe cooperación alguna entre Buenos Aires y Teherán.
El canciller Timerman no sólo no dio más detalles del encuentro bilateral que mantendrá en Nueva York con su par iraní en el marco de la ONU. Tampoco confirmó si accederá al pedido iraní y se limitó a emitir el comunicado donde añadió que en la asamblea de la ONU se confirmaron las reuniones bilaterales con los cancilleres de Israel, Rusia, Italia, Argelia, Holanda, Paquistán, Portugal, Sierra Leona y Eslovenia.
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