Las CGT analizan una huelga

Tras dos semanas de acciones separadas, los líderes de las dos CGT, Rodolfo Daer (dialoguista) y Hugo Moyano (disidente) se reunirían hoy en un sindicato adepto al dirigente camionero para definir una posible huelga conjunta para la próxima semana.

El distanciamiento entre ambas centrales se había agudizado desde que la CGT rebelde decidió movilizarse el 20 del mes último a la Plaza de Mayo para criticar al Gobierno y pedir la normalización del PAMI, mientras que los hombres de Daer priorizaron el diálogo para concurrir a la Casa Rosada debido a la concertación convocada por el presidente Fernando de la Rúa y exponerle los temas que son su prioridad, entre ellos, la inmediata derogación del decreto de asignaciones familiares dictado a principios del mes último.

Las medidas económicas de restricción del retiro de efectivo de los bancos, anunciadas el fin de semana por De la Rúa y por el ministro de Economía, Domingo Cavallo, volvieron a unir al sindicalismo.

Por eso, así como el consejo directivo de Moyano convocó para mañana a un plenario de delegados regionales (que seguramente llamará a un comité central confederal que facultará a realizar la semana próxima movilizaciones en todo el país y un paro de 36 horas), Daer buscó ayer los consensos entre miembros del secretariado nacional de la CGT oficial para hacer lo propio con una huelga de 24 horas.

Daer visitó entre ayer y anteayer a Luis Barrionuevo (propenso a la medida de fuerza), Carlos West Ocampo (Sanidad), Armando Cavalieri (mercantiles), Gerardo Martínez (construcción) y a otros dirigentes para conseguir el aval para el paro.

A las puertas del paro

En la reunión de hoy con Moyano (que se haría en la Unión Tranviarios Automotor, UTA), podría delinearse una huelga futura de 24 o 36 horas.

Aunque desde la CGT dialoguista destacan las buenas intenciones del jefe de Gabinete, Chrystian Colombo, (con quien tienen contactos permanentes), Daer dijo a LA NACION que "el dueño del Gobierno es Cavallo" y que la búsqueda de la concertación "no puede hacerse sobre hechos consumados, como es este nuevo atropello sobre el salario de los trabajadores".

Como presagio del agotamiento en las negociaciones con el Poder Ejecutivo, y después de reunirse anteayer con Colombo, Cavalieri había anticipado que "el Gobierno se caracteriza por su inoportunidad y se adelantó (con el decreto restrictivo) a quebrar el llamado al diálogo".

Después de que se conocieron las últimas medidas económicas, la CGT que lidera Moyano convocó inmediatamente anteayer a sus principales dirigentes en el sindicato de camioneros. Después de más de cuatro horas de discusiones, se decidió la convocatoria que derivaría en una nueva movilización a la Plaza de Mayo para la semana próxima.