Los dos intendentes de San Luis se enfrentarán hoy en la Corte
La Corte Suprema intervendrá hoy en el insólito conflicto que tiene desorientados a los habitantes de esta ciudad, que está planteado por la existencia de dos intendentes que se disputan el poder municipal: la adolfista María Angélica Torrontegui y el peronista disidente Daniel Pérsico.
Al tribunal, que escuchará los argumentos de las partes en una audiencia privada, le será difícil mediar en la disputa: ambos bandos aseguran que defenderán a quienes los han votado y se niegan sistemáticamente a una tercera elección para dirimir un pleito que ya incluyó escenas de violencia, detenidos y heridos durante las últimas semanas.
Todo comenzó a complicarse cuando el entonces intendente capitalino Carlos Ponce, ex ministro y hoy opositor acérrimo de los Rodríguez Saá, llamó a elecciones el 9 de noviembre último, en las que triunfó Pérsico.
La administración del gobernador Alberto Rodríguez Saá desconoció estos comicios y mantuvo la fecha del 23 de noviembre para las elecciones, en las que triunfó Torrontegui. A partir de entonces, los ciudadanos no saben a ciencia cierta dónde pagar sus impuestos o si les reconocerán como válidas las boletas de patentes de sus autos.
Desde el edificio de la intendencia, Pérsico se muestra preocupado. "La gobernación nos ha quitado los fondos de la coparticipación y se los ha dado a Torrontegui. Nos quieren asfixiar", repite. Y adjudica los episodios de violencia del jueves 4, cuando trabajadores municipales se enfrentaron con la policía, a la intransigencia de Torrontegui, quien desoyó una orden judicial que la obligaba a abonar los sueldos. "No tengo más fondos, y la paciencia de la gente tiene un límite", asegura.
La ex diputada nacional se niega a pagar, a menos que los trabajadores municipales (en su mayoría leales a Pérsico) trabajen a sus órdenes, en la Legislatura provincial, sede de su administración. Su visión es totalmente opuesta.
"Los usurpadores utilizan la violencia como arma de presión", dice desde su despacho, y recuerda que los municipales utilizaron camiones y topadoras en aquella manifestación, que terminó con una veintena de heridos y varios detenidos.
¿Qué puede pasar hoy? Ambos intendentes aseguraron que irán a la audiencia con ánimo constructivo. "Vamos a concurrir. Esto va a ayudar a acelerar los tiempos legales", opinó Pérsico. "Me parece importante que la Corte escuche a las partes", dijo Torrontegui, quien lamentó "que Pérsico no haya accedido a dialogar sobre el tema con nosotros. Debe estar sometido a una gran presión". De todos modos, la Corte se inclinaría por escuchar a las partes.
Una tercera elección no entra en los cálculos de casi nadie. "Voy a ir a la reunión a defender los votos de los puntanos. La elección ya se hizo", definió Torrontegui. "No somos guerrilleros, pero no vamos a aflojar ahora", asegura Pérsico.
"La única salida a este atolladero es una tercera elección con garantías, en lo posible de la justicia federal", opinó el político opositor Juan José Laborda Ibarra, derrotado por Torrontegui en las elecciones de noviembre último.
Focos de tensión
En tanto, en la provincia existen otros focos de tensión que también contribuyen a agravar la situación.
Hoy se realizará una nueva marcha de silencio y cacerolazo, que fueron convocados para las 18 por el denominado grupo de "laicos católicos autoconvocados", que reclaman al gobierno de San Luis que dé un paso atrás en las rescisiones de los contratos con las congregaciones religiosas que dirigían institutos de menores y ancianos en la capital puntana.
Esta vez, a diferencia de la semana última, la protesta se ampliaría a toda la provincia, ya que se coincidirá con el cacerolazo a las 20, tanto en esta ciudad como en varias localidades del interior provincial.
Hasta anoche continuaban tomadas distintas escuelas en la provincia por parte de los padres y docentes que rechazan la irregular designación de setenta directores normalizadores.
Pero en uno de los establecimientos se vivía una situación particular. La Guardia de Infantería de San Luis, munida de bastones, ingresó anoche en la escuela número 70 del barrio ATE 1, para impedir que los padres tomen el colegio.
Todo eso generó el clima para un nuevo escenario de violencia similar al que se vivió hace unos 15 días.
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