El jefe de gobierno fue reelecto por amplio margen

El 64,25% de votos que consiguió Pro en el ballottage de ayer es la marca más alta registrada en las tres segundas vueltas que tuvieron las elecciones en la ciudad de Buenos Aires desde que se elige jefe de gobierno.

El líder de Pro celebró anoche su amplio triunfo en la ciudad, en una elección que le permitió retener la jefatura de gobierno por otros cuatro años. Su rival del kirchnerismo, Daniel Filmus, no pudo revertir la derrota de la primera vuelta y asumió "toda la responsabilidad" por los resultados. La presidenta Cristina Kirchner se comunicó con Macri para felicitarlo.

Escrutadas el cien por ciento de las mesas, Macri obtuvo un 64,2 por ciento de los votos y Filmus, un 35,7%. La participación del electorado superó el 70%, mientras que en las mesas de votación el proceso se desarrolló sin inconvenientes.

El líder del espacio del Pro, llegó cerca de las 21 de ayer a un búnker vestido de fiesta. "Esta es la victoria de una forma de hacer política, estos votos son de las personas que quieren una política de servicio", señaló.

Repercusión nacional. El kirchnerismo suma así otra derrota electoral, luego del traspié de Santa Fe donde quedó tercero. Desde el FPV buscaron despegar el resultado de Cristina Kirchner: leyeron que el electorado tiene "tendencia de votar a los oficialismos" y aseguraron que la Presidenta tiene aceptación en Capital Federal.

El legislador porteño, Juan Cabandié, afirmó ayer que hay "una garantía de que Cristina tiene una empatía realmente impresionante en la ciudad" y dijo estar "contento con lo que va pasar el 14 de agosto y el 23 de octubre".

Por su parte, el ministro del Interior, Florencio Randazzo, señaló: "Sabemos que los referentes del kirchnerismo tienen que trabajar en tener una presencia mucho más fuerte en la Capital". "De las ocho elecciones que hemos tenido en el país, ganamos seis", enfatizó.

Tras conocer la victoria, el jefe de gabinete, Horacio Rodríguez Larreta, anunció que continuará la campaña de Pro en diferentes puntos del país, aunque no dio ninguna señal respecto a qué candidato presidencial apoyará su espacio.

El presidente del bloque del Pro de diputados nacionales, Federico Pinedo, advirtió en medio de los festejos que el gobierno nacional debería "leer" el resultado del ballottage porteño como "un llamado de atención para cambiar el estilo y abandonar un proyecto de poder para hacerlo de desarrollo".

Ayer, alrededor de dos millones y medio de porteños definieron con su participación una elección de alto impacto nacional, seguida de cerca por el kirchnerismo y el arco opositor.

Votación sin inconvenientes. El escrutinio del ballotage fue más expeditivo que en la primera vuelta, dado que el proceso, con sólo dos boletas, resultó más simple.

El director general Electoral de la ciudad de Buenos Aires, Julián Curi, informó que los comicios se desarrollaron "con normalidad" y que "no hubo ninguna situación conflictiva".

Con la elección de ayer, el líder del Pro ratificó el amplio triunfo de la primera vuelta electoral, donde había obtenido el 47,1 por ciento de los votos.

En la primera vuelta porteña el Pro obtuvo la primera minoría en la Legislatura: 26 de las 60 bancas. Además, el macrismo controlará al menos 12 de las 15 juntas comunales. Cada junta comunal estará encabezada, a partir del 10 de diciembre próximo, por un presidente, que será el titular de la lista más votada, e integrada además por otros 6 vocales que serán responsables de la gestión local.

Sin aliados. Los candidatos llegaron al ballottage sin aliados de otras fuerzas. Proyecto Sur, que lidera Fernando Pino Solanas, dejó en libertad de acción a sus votantes.