Senado: Fernández expuso un informe sobre la gestión del Gobierno

En su primer informe ante el Congreso Nacional, el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, consideró hoy que la Argentina está ante "su última oportunidad" para revertir su grave situación económica y política, y que el presidente Néstor Kirchner es consciente de ello.

Al cumplirse exactamente un mes de la llegada al poder de la actual administración, el funcionario aprovechó su exposición ante el Senado para promover una nueva forma de entender el rol de la política que él sintetizó al hablar de "la importancia de crear un Estado inteligente".

Las optimistas definiciones conceptuales de Fernández se encontraron con un nivel moderado, pero también impensado, de críticas de parte de miembros de la bancada radical.

Los senadores opositores criticaron la falta de respuestas al cuestionario que le habían enviado previamente y la ausencia de canales de diálogo con el Gobierno, y le señalaron la vinculación del jefe de Gabinete con la administración menemista, que en su exposición había cuestionado en varios pasajes.

De todos modos, el jefe de ministros no pasó mayores sobresaltos y toda la sesión quedó teñida de la inevitable sensación de tedio que envuelve estos informes mensuales ante el Congreso que fijó la Constitución reformada en 1994.

Durante su exposición, Fernández apeló a un estilo informal y para eso evitó la lectura del informe que había sido distribuido previamente, al que sólo tomó como guía para su alocución.

En primera instancia se dedicó a hacer una rápida revisión de las dos décadas pasadas, "la del `80, cuando se produjo la desaparición de la economía, y la del ´90 cuando se produjo la desaparición del Estado".

Después de recordar que "la sociedad que soportó esas dos décadas reaccionó en diciembre de 2001", el jefe de Gabinete aseguró que "el presidente Kirchner entendió mejor que nadie el reclamo de cambio, él sabe que tal vez ésta sea la última oportunidad que tenga la Argentina".

Fernández pidió un "trabajo conjunto entre el Gobierno y el Parlamento" y habló de "tratar de articular una vinculación distinta" entre ambos poderes del Estado.

La directriz de ese trabajo, según su criterio, debe ser "construir un Estado inteligente, ni grandilocuente ni magnífico. Un Estado es inteligente cuando aparece para marcar reglas de juego y castigar al que no las cumple".

Después repasó las principales tareas del Gobierno en su primer mes en funciones, entre las que mencionó la ayuda de 320 millones de pesos a Santa Fe por las inundaciones y las gestiones realizadas en Entre Ríos y San Juan para normalizar la situación de los docentes.

También anticipó el lanzamiento de un plan de construcción de 19.500 viviendas, que insumirá 270 millones de pesos en inversiones y que permitirá crear 58.000 puestos de trabajo.

En otros pasajes de su exposición, Fernández defendió el recambio de la cúpula de las Fuerzas Armadas, la instrumentación de un proceso de designación de jueces de la Corte Suprema, la reivindicación de la soberanía sobre las islas Malvinas y la asociación estratégica con Brasil en el marco del Mercosur.

Fuente: DyN