Ladrón de exportación: pasó de las entraderas en el conurbano a robar casas en Europa

Entre risas, decía que había que aprovechar el invierno romano. Yamir Antiman hablaba con un supuesto compañero de fechorías conocido como "El Gordo". No sabían que sus líneas telefónicas estaban intervenidas. Su interlocutor, a carcajadas, le adelantó que a su regreso le iba a "manguear" dinero. Estaba convencido de que le iba a ir bien. "Van a venir con los bolsillos llenos, les tengo una fe bárbara", soltó el hombre que conversaba con el viajero. No hablaban de negocios legales. Era una charla entre ladrones, especialistas en robar casas e integrantes de la denominadabanda de Los Mara, desbaratada la semana pasada.

La conversación entre Antiman y "El Gordo" fue el 12 de marzo pasado, un día antes de un robo perpetrado en una casa de Munro donde la banda se hizo de un botín de U$S 100.000.

Antiman viajaba a Europa por placer y para protagonizar robos. Así lo informaron calificadas fuentes judiciales y policiales. Los investigadores consultados por LA NACIÓN sospechan que, si bien en la conversación habló de un viaje a Italia, anteriormente habría protagonizado hechos delictivos en Suiza y Francia.

Planeaba disfrutar del botín alcanzado en Italia con unas vacaciones en el Caribe, pero sus planes se frustraron. Finalmente fue atrapado poco antes de ser detenidos sus cómplices en un operativo que expuso el poder económico alcanzado por esa organización criminal que desvalijaba viviendas en el conurbano.

La banda de Los Mara protagonizaba robos en Vicente López, San Isidro y Villa Ballester. Sus integrantes fueron detenidos la semana pasada, después de una investigación del fiscal Patricio Ferrari y detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de San Isidro.

El último viaje de Antiman, que está preso desde mayo pasado después de una persecución y tiroteo en San Martín, fue el 15 de marzo pasado y volvió dos semanas después.

En enero había viajado a Francia. No solo iba con sus cómplices. Voló acompañado por su mujer, que en su perfil de la red social Facebook subía las fotos de las visitas a la Torre Eiffel.

"Pudimos llegar a Francia, Paris [sic]. Él directo a cumplir mis sueños, mis caprichos!! Te amo tanto. Siempre hasta el final juntos... siempre", escribió en Facebook la pareja de Antiman. Era el 23 de enero pasado. Volvieron a Buenos Aires el 7 de febrero. Estuvieron en Europa casi un mes.

Antiman, como la mayoría de la banda, vivía en el bajo Boulogne, en San Isidro. La investigación que posibilitó desbaratar a la organización criminal comenzó el 9 de mayo del año pasado.

Un aporte clave fueron los datos precisos entregados por un testigo de identidad reservada. "Quiero denunciar a una verdadera banda de asaltantes del bajo Boulogne que desde hace años son los que cometen los robos en distintas casas del de San Isidro y en inmediaciones. Tienen dos modalidades: la primera menos frecuente es que trabajan con dato. Esto significa que realizan los robos con información que alguien previamente les entrega sobre los movimientos en alguna casa y sobre todo en relación a la cantidad de dinero que puede haber en esos lugares siempre que sean sumas altas", les afirmó el informante a los detectives policiales y judiciales.

La otra modalidad, según el testigo de identidad reservada, eran los escruches, robos en casas durante la ausencia de sus propietarios. "Son los escruchantes [la banda de Los Mara] más conocidos de la zona y que más se han enriquecido por los robos que cometieron. Hacen una inteligencia previa en las casas detectando que no haya alarmas o cámaras de seguridad. Estudian un poco los movimientos de la familia para intentar asegurarse de que no haya nadie. Por lo general, realizan los robos durante los fines de semana largos o cuando la gente está de vacaciones o sale a cenar", relató el informante, según se desprende del expediente judicial.

A diferencia de la mayoría de la banda que cayó la semana pasada, Antiman fue apresado en mayo durante un robo en Villa Ballester, en San Martín. Un vecino llamó la número de emergencias 911 cuando vio que unos ladrones irrumpían en una casa lindera.

Según fuentes policiales, Antiman intentó escapar por los techos y le disparó a los uniformados. Pero su huida terminó cuando fue herido en las piernas y fue esposado.